Familiares de un alumno de tercer grado de la escuela primaria José María Uranga, denunciaron que el menor es víctima de constantes agresiones físicas y verbales a manos de sus compañeros, y a pesar de estar enterados la maestra y la dirección no hacen nada para remediarlo.
Damaris Jaqueline Villastrigo Pecina, tía del niño afectado, denunció que el pequeño “Michel” empezó con un comportamiento atípico desde hace un mes, lo que llamó la atención de sus familiares.
Relató que sus compañeros de clases lo golpean y le dejaron las “pompis” moradas a patadas, hecho que la sicóloga del plantel conocía, pero nunca les avisó de la situación.
Xóchitl de la Fuente, es la maestra que está impartiendo el tercer año de escuela, y no ha puesto la debida atención a los infantes, pues al pequeño Michel se la pasaba diciendo que era un “chismoso” cuando reportaba que lo agredían.
La madre de Michel, se encuentra convaleciente de su salud médica, por eso ella no pudo asistir pero mandó a su hermana, porque ya no saben qué es lo que tienen que hacer para poner alto a las agresiones.
Relató que los dos niños uno de nombre Bryan y otro compañerito en reiteradas ocasiones lo han golpeado; “La primera vez le dejaron las pompis moradas, después lo sofocaron al pegarle en el abdomen entre varios niños, también hubo una ocasión en que lo metieron al baño y lo mojaron todo, el niño salió llorando”.
La familia afectada solicitó la intervención de la subdirección de Servicios Educativos, para poner un alto a los abusos y brindar atención psicológica a todos los involucrados.
