Familiares de Adrián Hernández Piña, que padece de insuficiencia renal, solicitaron el apoyo a la sociedad para poder adquirir una silla de ruedas para que pueda tener más movimiento, ya que está en una etapa complicada, donde ponerse de pié se le dificulta mucho.
El 24 de diciembre, Periódico La Voz conoció la historia del hombre que vendió su casa y todas sus pertenencias para “seguir un ratito” con vida.
Se trata de un hombre de 49 años que se ha quedado en la calle pues vendió su casa, sus muebles y todas sus pertenencias para poder sobre llevar la insuficiencia renal que se le detectó hace 8 meses atrás.
Durante los primeros meses que enfermó, pagó de tajo 60 mil pesos en la clínica del Magisterio donde le realizaron hemodiálisis, luego por semana, aportaba 6 mil pesos al nosocomio por tres diálisis semanales.
Adrián Hernández Piña, oriundo del estado de Puebla, pudo pagar este tratamiento solo por un tiempo, pues vendió su casa y mobiliario que tenía al sur de México para poder salvar su vida y poder vivir más tiempo.
Al terminarse su dinero ya no pudo pagar el tratamiento tan costoso que merece una insuficiencia renal, por lo que no fue aceptado de nueva cuenta en la institución médica.
Pasó semanas sin recibir las atenciones médicas, hasta que familiares pudieron conseguir el Seguro Popular al poblano, al principio se les negaba, pues él tenía tratamiento de hemodiálisis y en el hospital general Amparo Pape de Benavides no se realiza esto, solo las diálisis.
Sin embargo, con apoyo de una persona pudieron ingresar a Adrián como afiliado.
Durante los últimos días su familia ha estado trabajando para conseguir una silla de ruedas, sin embargo no cuentan con el recurso para adquirirla por lo que piden el apoyo a la sociedad para ayudarle a Adrián en su situación.
