Habitantes de la Colonia Patricia Páez ubicada al Suroriente de Monclova, se sienten decepcionados por la ola de robos que han resentido durante los últimos meses ya hay muchos vecinos afectados.
Una de las señoras que sufrió en carne propia llegar a su casa y ver que le faltaban sus pertenencias nos relató los hechos. Hemos cambiado su nombre y omitiremos su dirección exacta para evitar que enfrente represalias, pues hasta amenazas recibió, pero aquí se las daremos a conocer más adelante.
Laura tenía dos semanas a penas de llegar a esa colonia con su familia, en pleno mediodía, salió de su casa para ir unas cuadras más adelante a comer con su familia, a las dos y media de la tarde iba a tomar el camión para ir a su trabajo cuando recordó que debía pasar por el cargador de su celular así que regresó a su casa de nuevo.
Antes de llegar a su casa alcanzó a ver que estaba una patrulla y los policías estaban fuera de la unidad y se encontraban con capucha para cubrirles el rostro, a ella se le hizo extraño; pero siguió su camino al llegar hasta su domicilio (unos cuantos metros más adelante) se dio cuenta que la puerta estaba abierta.
Entró y vio que le faltaban varios objetos del interior de su domicilio, así que se acordó de que estaba la patrulla afuera y por más que salió corriendo la patrulla ya no estaba.
Le robaron una televisión de 32 pulgadas, una Tablet, un tanque de gas, ropa de su esposo y joyas; tanto la cama como su peinador y los alhajeros estaban movidos de lugar y la corriente del domicilio fue cortada.
Laura llamó al 911 para reportar el robo y le comentaron que le enviarían una unidad, y ella les hizo referencia que ahí había una patrulla cuando llegó a su casa; los vecinos no vieron nada. En minutos regresó la misma patrulla con los elementos que ella encontró en su misma calle, cuando les dieron a conocer la situación comentaron que ellos no vieron nada, y cuando les preguntaron qué hacían ahí ellos dijeron que justamente perseguían a un ladrón, pero que no era el mismo porque al otro lo venían siguiendo de Castaños.
Le comentaron que sabían que por ese lugar robaba un sujeto al que le apodaban “El Chore”, se retiraron no sin antes comentarle a la afectada que interpusiera su denuncia.
Laura decidió ir al día siguiente a poner su denuncia e incluso llevó las facturas de los objetos que le hurtaron.
Ese mismo día por la tarde (un día después del hurto) ella se encontraba limpiando el frente de su casa cuando llegó un joven y le dijo “señora ¿Usted es a la que le robaron?
¿Usted me denunció?” me dijeron los policías” Y la amenazó “hasta donde tope señora”.
Laura asegura que unas horas antes al interponer su denuncia por robo, nunca mencionó un hombre o un apodo de una persona, simplemente se limitó a denunciar los hechos para que se iniciara una investigación, pero que nunca jamás hizo la denuncia en contra de un sujeto identificado.
De esta manera, se le hace muy sospechoso el hecho que los policías la hayan “señalado” y la pusieran en contra del joven que se presentó en su casa, pues ella nunca denunció a una persona en particular.
Días después, volvieron a robar en la misma calle, y como ésta historia hay muchas más en la colonia “nueva”.
Hay otra mujer que también fue contactada a través de redes sociales a quien presuntamente también se metieron a su domicilio y le hurtaron parte de sus pertenencias.
Otra más, relata que en la noche no puede dormir porque escucha ruidos en los alrededores de su hogar, ya todos los vecinos sienten psicosis de cómo se encuentra la situación en esta colonia.
