MONTERREY.- Los Tigres están de regreso y humillan 4-0 a Pumas para colocarse más cerca de la Liguilla.
Durante los primeros minutos del encuentro, Pumas circuló el balón de polo a polo. Los locales buscaban de forma insistente a Ismael Sosa, quien no pudo pasar a Darío Verón en claros mano a mano.
Tras varios despliegues de Tigres por las bandas, llegó el error de Pumas en defensa, que culminó en un mano a mano entre Alfredo Saldívar e Ismael Sosa, mismo que el argentino hizo válido para adelantar a los locales 1-0.
Los dirigidos por Francisco Palencia tuvieron sólo una oportunidad de empatar el encuentro, pero Bryan Rabello y Javier Cortés, erraron cuando se encontraron solos frente a Nahuel Guzmán.
Damm la volvió a hacer. Dejó atrás a toda la defensa felina, pasó a Saldívar y cruzó para el tercer tanto de Tigres.
Sin embargo, para el aficionado local, faltaba la cereza en el pastel. Su ídolo, André-Pierre Gignac, con un tiro de larga distancia, venció al arquero visitante para que el Volcán hiciera erupción. Puso el cuarto en los cartones.