Los desórdenes alimenticios están ligados a problemas de autoestima, psicológicos e incluso una evasión de la realidad
Cuando su mujer lo abandonó “Héctor N” trató de suicidarse y como no lo consiguió se refugió en la comida al grado de llegar a pesar 160 kilos de peso, sin importar las consecuencias.
Un día se dislocó la cadera y tocó fondo, descubrió que tenía motivos para salir adelante, trató de superar su depresión y buscó ayuda, misma que encontró en el grupo de Tragones Anónimos, un sitio que pocos conocen.
“Aunque algunos digan que son felices y no les importa su físico, lo cierto es que nadie quiere estar gordito”, enfatizó el encargado del grupo Tragones Anónimos.
Este lugar opera desde el año 2011 en Monclova y desde entonces han apoyado a muchas personas, en su mayoría mujeres con sobrepeso, a enfrentar su adicción a la comida y sus malos hábitos alimenticios.
El centro de ayuda está ubicado en la calle Cuauhtémoc esquina con Río Aguanaval en la colonia El Pueblo. Las puertas están abiertas las 24 horas para todos los interesados en pertenecer al grupo y recibir orientación sin ningún compromiso.
Héctor es una de las personas que encabezan el grupo y comenta que actualmente son ocho personas las que se encuentran adheridas, todas mujeres. “Por lo regular en todos los centros establecidos en el País, la mayoría de las personas que lo integran son mujeres”.
“A cada una de las personas se le brinda e informa el plan de alimentación, que consta de verduras, frutas, carbohidratos y proteínas; cómo cocinar y pesar todo lo que van a comer para que en base a ello se integren a una nueva vida”.
Expuso que realizan pláticas y reuniones donde cada persona comparte su testimonio y expresa sus inquietudes, problemas y experiencias malas. Esto les ayuda a motivarse porque se dan cuenta que no son los únicos que padecen esta situación.
Héctor comentó que la terapia en grupo ayuda mucho a superar la depresión “a veces las personas que llegan con nosotros atraviesan problemas fuertes de depresión, baja autoestima, aparte de ello su problema de sobrepeso”.
Destacó que cuando se realizan los encuentros con todos los miembros del grupo, ellos logran sacar todos los sentimientos que traen adentro y de esta forma se desahogan exponiendo en tribuna el daño que les está haciendo pasar por comer compulsivamente.
TRATÓ DE MATARSE
Platicó que en lo personal llegó a pesar más de 160 kilos, al ser abandonado por su mujer entró en depresión y trato de quitarse la vida, sin embargo su hermano llegó de visita esos días tan difíciles y sus malos pensamientos se fueron.
Platicó que fue operado de la cadera pues se le dislocó debido a su sobrepeso, logrando caminar una vez más y tras acudir al grupo de Tragones Anónimos, pudo bajar hasta 40 kilos.
EMPRESAS NO CONTRATAN GORDOS
“Desgraciadamente las personas que ayudamos en su mayoría ha sufrido abuso, maltrato, e inclusive violencia y para colmo son discriminadas en el ámbito laboral pues no consiguen un trabajo”.
En el Grupo de Tragones Anónimos muchas personas deciden anexarse, es decir, permanecer en las instalaciones por algún tiempo. Ahí se les brinda un lugar dónde dormir y alguien que les suministre comida de acuerdo a su plan alimenticio.
Héctor invita a todas las personas que requieran ayuda para que vivan la experiencia y no rechacen lo que no conocen, “lo único que van a perder son kilos”, sentenció.
Mayoría de integrantes son mujeres
Héctor es una de las personas que encabezan el grupo y comenta que actualmente son ocho personas las que se encuentran adheridas, todas mujeres.
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Aunque algunos digan que son felices y no les importa su físico, lo cierto es que nadie quiere estar gordito”
Encargado del Grupo
Tragones Anónimos
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COMER COMPULSIVAMENTE ES UN TRASTORNO
Es un trastorno de la alimentación en el cual una persona ingiere, de manera regular, cantidades de comida inusualmente grandes. Durante el apetito desenfrenado la persona también experimenta una sensación de pérdida de control y no es capaz de parar de comer.
La causa del apetito desenfrenado se desconoce. Los factores que pueden llevar a este trastorno incluyen:
> Genes, como por ejemplo tener familiares cercanos que también tienen un trastorno alimentario.
> Cambios en la química del cerebro
> Depresión u otras emociones, como sentirse molesto o estresado.
> Dieta malsana, como no comer suficientes alimentos nutritivos o saltarse las comidas.
