La señora Jazmín se quejó de la injusticia de los policías
Los policías de tránsito en la Zona Centro de la ciudad, trabajan de manera ardua para no dejar estacionar a ciudadanos en lugares prohibidos; pero en esta ocasión una mujer se quejó de la arbitrariedad con la que levantaron infracciones a ella y sus familiares cuando llegaban a la iglesia Santiago Apóstol para hacer una misa de cuerpo presente de su difunto primo, incluso hasta a la carrosa le pidieron que se moviera del lugar cuando aún no bajaban el cuerpo.
La señora Jazmín Arriaga Saucedo, de la colonia El Pueblo señaló que arribaron a la iglesia a las diez de la mañana y que en menos de diez minutos un elemento empezó a infraccionar a los autos de ella y su familia, un total de ocho automóviles.
“No es justo, que respeten de perdido el dolor que trae uno, nos venimos detrás de ellos cuando nos dimos cuenta y caminaron presurosos hasta que se nos perdieron, se aprovechan de que no podemos quedarnos a averiguar la causa, porque tenemos que ir rápido al panteón al entierro”.
Indicó que cuando iba llegando la carroza con el féretro también la movieron de lugar porque le mencionaron que no podía estacionarse ahí, cuando siempre lo han hecho para bajar y subir el cajón de los difuntos.
“Está bien que estén haciendo su trabajo, pero deben ser un poco más observadores y entender que no llegamos para molestar a la gente, no estábamos haciendo nada mal, no estábamos tomando en vía pública o con música a todo vuelo”, concluyó.
