Donald Trump acusó este miércoles a su exasesor, Steve Bannon, de haber "perdido la cabeza".
Asimismo,
expresó que está desvinculado completamente con su Presidencia, después de que salieran a la luz críticas del exestratega jefe a una reunión con rusos que mantuvo en 2016 el hijo del mandatario estadunidense.
Steve
Bannon no tiene nada que ver conmigo ni con mi Presidencia. Cuando fue despedido no solo perdió su trabajo, perdió la cabeza", afirmó el magnate en un duro comunicado difundido por la Casa Blanca.
Según un adelanto del libro "Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Trump", de Michael Wolff, Bannon arremetió contra tres personas próximas a Trump: su hijo Donald Junior, su yerno Jared Kushner y su ex jefe de campaña Paul Manafort.
Trump se pronunció así después de que el diario británico The Guardian publicara el extracto de un libro en el que
Bannon califica de traición y antipatriota la decisión del hijo del mandatario,
Donald Trump Jr., de reunirse en junio de 2016 en Nueva York con la abogada rusa Natalia Veselnitskaya.
El comunicado del presidente republicano supone una abrupta ruptura con
Bannon, que fue su último jefe de campaña y se convirtió en su estratega jefe desde enero de 2017 hasta agosto, cuando fue despedido sin más explicaciones y regresó a la publicación ultraconservadora Breitbart News.
Incluso después de su destitución, Trump había seguido defendiéndolo, pero ahora es un activista contra el aparato del partido republicano y a favor del populismo nacionalista que dio alas al presidente.
"Steve finge estar en guerra con los medios de comunicación, a los que llama el partido de la oposición, pero pasó su tiempo en la Casa Blanca filtrando información falsa a los medios para hacerse parecer más importante de lo que era. Es lo único que hace bien", aseguró Trump en su comunicado, conforme
The New York Times.
"Rara vez estuvo en una reunión a solas conmigo y sólo finge haber tenido influencia para embaucar a unos pocos que no tienen acceso ni tienen ni idea, a los que ha ayudado a escribir libros falsos", añadió el mandatario en referencia a la obra de Michael Wolff en la que aparece citado
Bannon.
El presidente también minimizó el papel del exasesor en su campaña electoral, al asegurar que se incorporó ella una vez que él ya era candidato republicano.
"Ahora que está solo, Steve se está dando cuenta de que ganar no es tan fácil como yo lo hago parecer. Steve tuvo muy poco que ver con nuestra victoria histórica, que se logró gracias a los hombres y mujeres olvidados de este país", sostuvo.
"Pero Steve sí tuvo todo que ver con la pérdida de un asiento en el Senado en Alabama que los republicanos habían retenido durante más de 30 años. Steve no representa a mi base electoral: solo actúa pensando en sí mismo".
Trump se refería a la elección especial de diciembre para cubrir un escaño del Senado por Alabama, para la que el magnate había respaldado a un aspirante republicano, Luther Strange; pero
Bannon impulsó a otro candidato, Roy Moore, que venció a su rival republicano y acabó perdiendo contra un demócrata tras ser acusado de abuso sexual a menores.
Excélsior