Rayo de Jalisco Jr.
Rayo de Jalisco Jr. nació el 1 de enero de 1960, en Guadalajara, Jalisco, México, hijo del legendario luchador Rayo de Jalisco Jr. y sobrino de luchadores, Tony Azúcar y Negro azúcar. No estaba inicialmente entrenado por su padre, como su padre no quería que su hijo siguiera en su profesión; en lugar de eso entrenó bajo la supervisión del Diablo Velazco.
“Quince años después de mi última presentación estoy aquí nuevamente por Monclova Coahuila, donde tuve un combate algo difícil y una rivalidad con el Cien Caras Jr., que debería demostrarme más sobre el ring y no tanta palabrería.
Primero Dios este próximo 28 de noviembre del presente año cumpliré mis 42 años de vida luchística sobre el ring. Mi señor padre don Max Linares fue mi mayor inspiración, quise seguir sus pasos y aquí estamos gracias a la disciplina, carácter y buena técnica que me inculcó.
La vida de un luchador es muy sacrificada, a veces piensan que estar de un lugar a otro es muy bonito, claro que lo es, pero en su mayoría la vida está llena de sacrificios pero también tiene sus beneficios.
Antes de salir al cuadrilátero, siento esa adrenalina por dentro que recorre mi cuerpo al ponerme la máscara y mi equipo de combate, mi mayor logro es estar dentro del gusto del público, además de estar sobre las luchas estelares, tantas lesiones, accidentes, una placa de titanio en las cervicales, muchas cosas, pero no pienso retirarme del cuadrilátero ya que es uno de mis mayores miedos.
Agradezco al hermoso público de Monclova, que ha seguido mi trayectoria, que permanezco como ídolo para algunos, que cada vez que yo esté por acá me voy a entregar en alma, vida y corazón sobre el ring para dejarles un gran sabor de boca, les agradezco de todo corazón y cuando algún día yo me retire me sigan recordando”.
SOLAR
Solar entrenó con Toño Cruz y el equipo hermano conocido como Los Calaveras antes de su debut en el anillo en 1975. El Solar enmascarado ganó rápidamente una reputación de ser un talentoso luchador colchoneta y se destacó por su innovadora y compleja presentación, la cual sostiene que iba a emplear durante los encuentros, el 29 de mayo de 1977 derrotó al Villano III para ganar el campeonato Mundial de Peso Welter.
En 1994 comenzó a trabajar para la triple A, donde se asoció con el Charro y el Mexicano, formando el trío de los folklóricos, tiempo después al trabajar para el CMLL, se juntó con el hijo del Solitario, siendo los Soles de la Maldad.
Después decidió trabajar en el circuito independiente siendo ya la década del 2000, luchando con otro de los grandes como lo es Negro Navarro, donde han acarreado multitudes dando cátedra sobre el cuadrilátero sobre la lucha de la vieja escuela.
El 3 de mayo del 2015 formó parte de la IWRG 2015 Festival de las Máscaras, un espectáculo en honor a las leyendas de la lucha libre, donde se asoció con Pantera I y Pantera II para derrotar a Canis Lupus, Eterno y Negro Navarro.
“Una gran trayectoria sobre mi vida en la lucha libre, que les puedo decir más de cuarenta años dejando todo sobre el cuadrilátero de pelea, mi pasión por la lucha nació una vez que a mí me sacaron del rancho ‘La Caguayana’ en Guadalajara para ir a ver el espectáculo de la lucha, yo ni sabía que existía esto, ahí me enamoré de éste deporte, fue amor a primera vista.
Me decidí a entrenar, para después pelear al mes de estar entrenando, fue difícil claro, pero no imposible nunca me di por vencido y jamás pensé llegar tan lejos sobre el cuadrilátero, mi mayor logro es tener salud, mi inspiración era ver al Solitario, su porte, toda esa fuerza que demostraba y yo pensé algún día voy a ser como él.
Externo mi agradecimiento a todo el público de Monclova que se mostraron felices y que en todo momento nos aplaudió, además me voy súper feliz por el gran apoyo y espero regresar por acá muy pronto.
Aníbal Jr.
“25 años sobre el ring se dicen fáciles, pero la verdad es que me ha costado mucho, de esto vivo, lesiones, peleas, recorrer el mundo, estar dentro de las carteleras grandes, ha sido muy difícil mi vida pero amo este deporte.
Mi mayor logro es estar aún en forma para seguir adelante y crecer más para estar dentro de los mejores de la lucha libre, ser hijo de uno de los grandes no es nada fácil, ya que uno busca mantener en alto el nombre de la familia, seguir a toda costa, obtener triunfos, máscaras, cabelleras, además de un éxito total.
Me agradó estar por estos rumbos de la República, una ciudad, un público acogedor que disfruta del evento de la lucha libre, no queda más que agradecer por la asistencia a la arena y aplaudir nuestro trabajo”.