FRONTERA, COAH.- Los malos tratos y el infierno que viven los internos de una casa de rehabilitación de la colonia Occidental fueron denunciados públicamente por familiares de una de sus víctimas, a la que golpearon sin piedad además de dejarlo sin comer.
Fue la madre del afectado, Víctor Hugo Saucedo Olvera, Gumercinda Olvera Hernández, quien acudió ante el Ministerio Público para interponer su denuncia por los cargos de tortura, lesiones y lo que resulte en contra del encargado del anexo denominado Escudo de Salvación, ubicado en la calle Allende número 612.
Familiares de Víctor mostraron su inconformidad públicamente en contra del anexo dirigido por Erick Abisael Alfaro Campos, luego que Víctor Hugo sufriera los peores momentos de su vida al ser vapuleado por sus propios compañeros e instructores.
También puedes leer: Nada detiene a Raquel
“Queremos que no quede impune, que las autoridades investiguen porque no es posible que los internos vivan en condiciones deplorables y para acabarla los torturen, buscamos que los familiares de quienes están internados abran los ojos, que los busquen y se darán cuenta de las condiciones en las que están, mi hijo está flaco, demacrado, el así no estaba, hasta tiene miedo”.
Los parientes del afectado agregaron que Víctor ingreso a la casa de rehabilitación por voluntad debido a los problemas que padecía con el alcohol y para eso tuvieron que pagar 900 pesos y posteriormente pagar 700 pesos más por semana para mantener la permanencia de su familiar en el centro pues a cambio ofrecían terapias psicológicas, tratamiento médico, alimentación, recreación y alojamiento.
“Nos negaron verlo, solo nos permitían verlo cada tres meses y se nos hizo demasiado, a cambio nos mandaban video donde lo veíamos saludando pero no le tenían permitido decir nada, lo que nos puso a pensar” indicó una de las hermana de Víctor, quien preocupada alertó a su madre para ir a buscarlo.
No fue hasta el pasado domingo cuando las hermanas Saucedo Olvera, acompañadas por su madre, llegaron hasta la casa de rehabilitación para exigir ver a Víctor Hugo, por lo que el encargado les permitió verlo brevemente debido a la insistencia de las mujeres, encontrándolo vestido con manga larga y tapado hasta el cuello.
“Eso se nos hizo rarísimo pues con este calorón y él con manga larga, ahí supimos que algo no estaba bien, por lo que decidimos distraer a los internos que teníamos ahí a lado, tratando de evitar que mi hermano nos contara algo, por lo que mi madre le preguntó al oído si le pegaban por lo que Víctor no aguantó más y le dijo que sí” narró la hermana del afectado.
Detallaron que como pudieron sacaron a Víctor del lugar, mismo que andaba vestido de dicha manera para ocultar los moretones que traía en el abdomen a consecuencia de la paliza que recibió en el sitio.
“Esa vez me pegaron entre varios, me patalearon, me dieron con algo pesado en la cara, ya no vi que era, una vez hasta me esposaron y me dejaron sin comer” relató Víctor al recordar el infierno que vivió en el anexo donde se suponía lo ayudarían.
Tras enterarse del abuso y la agresión que sufrió Víctor, sus familiares exigieron una explicación a Alfaro Campos, pero cerca de dar alguna razón se negaba a dejar salir al interno, siendo posible gracias a la presión de sus parientes, quienes se negaron a firmar una hoja responsiva que Erick les daba.
