Solo un mes después de que un tractocamión atropelló y mató a una niña en la colonia Praderas, las unidades de carga pesada volvieron a circular libremente por las colonias sin que Seguridad Pública lo impida.
El operativo de Seguridad Pública donde se infraccionaron a 18 unidades, fue “flor de un día”, ya que posteriormente la vigilancia se relajó, permitiendo la circulación de tractocamiones por las estrechas calles del sector sur.
La prohibición de la Dirección de Seguridad Pública a los conductores de tracto camiones de ingresar a las colonias resultó todo una farsa.
En recorrido por la colonia Obreras, Praderas, Otilio Montaño, entre otras que se encuentran al sur de la ciudad, fue evidente un importante número de unidades que circulan por las angostas calles.
El problema continúa por la irresponsabilidad de choferes, las líneas de tráileres, así como la falta de acciones reales de las autoridades de la Policía Preventiva Municipal, así como Departamento de Vialidad.
Aunque el jefe policiaco sostuvo una reunión con el presidente de la Cámara del autotransporte de Carga (Canacar), Gerardo Bortoni, para revisar el problema, no se están tomando las medidas de seguridad necesarias.
Apenas el primero de abril, el conductor de una unidad de la empresa “TMC” atropelló a una pequeña de 4 años y a su tía en la colonia Praderas, donde lamentablemente la menor perdió la vida.
Además constantemente los camiones con carga ingresan a las zonas comerciales durante el día a pesar de existir un horario definido para hacerlo, incluso llevándose de encuentro postes, cables, y ocasionando accidentes.