Por: Carlos Herrera
Doblemente consentido se la pasó Gabriel Peña quien cumplió su primer año de vida y recibió el sacramento de bautizo, motivo por el cual le organizaron un gran festejo.
Sergio Peña y Gabriela Hernández son los papás que se desvivieron por que su hijo pasara un día maravilloso e inolvidable en compañía de su familia y amistades, siendo buenos anfitriones en la fiesta que tuvo lugar en un salón de eventos sociales.
La iglesia San José Obrero fue testigo de la ceremonia de bautizo en el que Gabriel fue presentado como nuevo cristiano ante la comunidad católica, siendo sus padrinos Clara Varela y Víctor Hernández quienes prometieron cuidar de su ahijado para que siga el camino de Cristo.