Por: Dina Flores
Comerciantes no quieren hablar por miedo a represalias
NADADORES, COAH.- A pedazos se está cayendo el techo del kiosco de la plaza principal de este pueblo, las tablas y estructuras se vienen abajo por falta de mantenimiento. Para colmo de males los comerciantes que se instalan en ese lugar cada lunes no quieren hablar del peligro que corren por miedo de que ya no los dejen vender.
El kiosco que tiene años de no ser objeto de mantenimiento y que ha pasado administración tras administración sin que haga algo por él, presenta un aspecto por demás deprimente, ya que además de que el techo se está viniendo abajo, las vigas que sostienen la estructura corren el mismo riesgo.
Pero lo más peligroso de este espacio es que los cables de la luz no están bien aislados debido a que quienes los utilizan en los festejos simplemente los dejan desprotegidos exponiendo a los niños que se suben para jugar a que sufran alguna descarga eléctrica.
Vemos el problema y siempre ha existido pero no podemos decir nada porque se enojan las autoridades, sin embargo, estamos al pendiente de que los niños no se suban ya que los cables de la luz y los contactos no están bien puestos y hay peligro.
Los más de 30 comerciantes que se instalan en la plaza principal temen perder su espacio si denuncian un problema que está a punto de propiciar una tragedia y que es del dominio público.