De manera tradicional los sambonenses festejan con ceremonia litúrgica a su santo patrono
Por: Azucena Tenorio
SAN BUENAVENTURA, COAHUILA.- En el marco de las celebraciones en honor al Santo Patrono San Buenaventura, se llevó a cabo la tradicional coronación litúrgica de las representantes de las festividades, reafirmando el vínculo entre la comunidad, su fe y las costumbres que han perdurado por generaciones.
El acto litúrgico fue presidido por el Obispo de la Diócesis de Saltillo, Hilario González Ortega en la parroquia San Buenaventura, donde se coronó a Andrea I como Reina, Valeria como Princesa, Anel como Duquesa y a Dana como Flor del Ejido, en presencia del alcalde Hugo Lozano Sánchez, funcionarios municipales y decenas de feligreses.
Durante su homilía, el Obispo Hilario destacó el ambiente de cordialidad, hospitalidad y unión que caracteriza a San Buenaventura, especialmente durante estas festividades. Subrayó que la celebración no solo fortalece la vida espiritual de la comunidad, sino también su tejido social.
"Estemos agradecidos con Dios por todos los beneficios que hemos recibido por su Santo Patrono. Tengamos actitud de confiar en el Señor en los momentos difíciles, no dejar de acudir y tener confianza en Él, y el compromiso de seguir a Jesús más de cerca", expresó el obispo.
Las festividades iniciaron desde temprana hora con las tradicionales mañanitas al Santo Patrono, interpretadas por diversos grupos religiosos locales, lo que dio pie a una jornada cargada de simbolismo y devoción.
Por su parte, el alcalde Hugo Lozano resaltó la importancia de conservar estas tradiciones que dan identidad al municipio.
"Esta ha sido una tradición muy arraigada en la gente de San Buenaventura. Nosotros estamos comprometidos en darle continuidad y encomendarnos al Santo Patrono. Las ferias, como cada año, se celebran en su honor el 14 de julio, y es un orgullo ver cómo la comunidad participa activamente tanto en lo religioso como en lo social", apuntó.
La coronación litúrgica es uno de los momentos más esperados de las Ferias Patronales, donde se reconoce a las jóvenes representantes del pueblo, uniendo el sentido religioso con el festivo, en una muestra clara de la identidad viva de San Buenaventura.