Empleadas denuncian malos tratos y amenazas por parte de la presidenta honoraria; acusan uso político de apoyos sociales.
Allende, Coah. – Empleados del DIF municipal de Allende señalaron a la presidenta honoraria de ser déspota y grosera en su trato diario. Denunciaron de forma anónima, por temor a represalias, que son obligados a trabajar más allá de su horario sin pago extra y bajo constantes presiones.
Las trabajadoras afirman que su jornada suele extenderse hasta las 8 de la noche, a pesar de que su salida oficial es a las 4 de la tarde. "Nos exigen más de lo que dan, y cuando llega la quincena no hay un solo peso de horas extras", expresaron inconformes. Incluso señalaron que han recibido amenazas de despido si se quejan de la situación.
A estas quejas se suma el testimonio de una madre soltera, quien relató que al pedir apoyo de pañales para su hijo recibió un trato hostil. Según narró, la presidenta le negó la ayuda argumentando que durante la campaña no "apoyó" al actual alcalde, lo que indignó a quienes presenciaron la escena.
Ciudadanos advierten que la política partidista está invadiendo un espacio que debería estar dedicado a la asistencia social sin distinciones. Trabajadores y beneficiarios coinciden en que el DIF se ha convertido en un lugar donde prevalece el maltrato y la discriminación, y piden que se revisen las prácticas internas antes de que el daño sea mayor.