Por: carolina salomon
SAN BUENAVENTURA-COAH.- A pesar de la pobreza, la familia Palos Puente mantiene vivo su espíritu navideño, no tienen los recursos para comprar artículos caros para decorar la casa pero los pequeños del hogar se la han ingeniado para siquiera tener un pino donde Santa Claus pueda dejarles sus obsequios.
Para que Papá Noel se dé cuenta que en esa vivienda hay niños, José y Lucía hicieron algunos dibujos en cada rincón de la casa.
La carencia en la navidad, tener que dibujar las esferas, estrellas y ángeles para decorar el pino.
En la puerta principal echa de pedazos de madera se encuentra un pingüino y una esfera, al interior un pino que el padre de los menores compró en 200 pesos dado a que no estaba completo por lo que en un bote lleno de piedras lo enterraron para que se quedará fijo.
Iraní Puente Preciado, contó que tenían el pino pero no había esferas, los niños echaron andar su imaginación y tomaron hojas y en ellas comenzaron a dibujar estrellas, esferas y ángeles, una vez pintadas las recortaron y les pusieron estambre para que pudieran colgarse en el pinito y que no se viera muy solo.
Señaló que un pequeño pedazo de foquitos consiguió su suegra que al ver a los niños con deseo de tener un pino navideño se los regló.
“Desde principios de diciembre querían tener puesto el pino para ponerle la carta a Santa, cumplimos dos años teniendo un pinito, ahora que mis hijos tienen 8 y 12 años”, dijo.
La madre de familia dijo que tienen muchas carencias pero eso no les impide sentir el espíritu de la navidad, con una mínima cosa como en este caso es el pino que con mucho esfuerzo lograron conseguir sus hijos se pusieron felices.
Y para que Santa Claus se dé cuenta que hay niños en la casa, se plasmaron estos dibujitos en la puerta.
Aunque José y Lucía le encargaron a Santa obsequios algo “caritos” puesto que comprando uno de esos sería mejor comprar frijol y tortillas para pasar tres días sin hambre, los padres harán lo posible podar darles un pequeño detalle.
“El niño encargó una pista de carros, cuatrimoto y una metralleta, la niña juego de mesa, una memoria y una funda para celular entre otras cosas que no podrán comprárselas”, señaló.
Por verlos con una sonrisa en su rostro, Iraní empeñará unos aretes de oro que conserva desde hace años entre otros artículos no de mucho valor pero que por ellos si le darán algo de dinero para comprarle a sus hijos un detalle.