Las adicciones pueden comenzar con medicamentos recetados. El Centro Fe, Esperanza y Amor alerta sobre su avance silencioso y sus efectos destructivos.
Por: Carolina Salomón
El pastor Valentín Bustos, director del Centro de Rehabilitación Fe, Esperanza y Amor, lanzó un mensaje urgente a la comunidad sobre los múltiples caminos —muchas veces invisibles— que pueden llevar a una persona a caer en una adicción. Destacó que incluso el uso de un medicamento recetado puede ser el punto de partida hacia un problema mayor.
Señaló que el espectro de las adicciones es mucho más amplio de lo que comúnmente se piensa, abarcando desde sustancias legales como el alcohol o ciertos fármacos controlados, hasta drogas estimulantes como las anfetaminas, la cocaína, el éxtasis o inclusive algunas pastillas para adelgazar.
"Una adicción puede comenzar con algo tan común como una medicina recetada. Por eso debemos estar alertas y no minimizar ninguna sustancia, aunque parezca inofensiva", expresó.
En su mensaje, advirtió también sobre el peligro de las drogas depresivas, como las benzodiacepinas, comúnmente utilizadas con fines médicos pero que pueden causar una fuerte dependencia.
"Estas sustancias relajan, pero también afectan la coordinación, reducen el tiempo de reacción y pueden inducir a comportamientos imprudentes e inconscientes", señaló.
Además, alertó sobre los efectos devastadores de los narcóticos como el opio, la morfina, la codeína y la heroína, conocidos por su alto poder adictivo y su capacidad destructiva tanto física como emocional.
"Estas drogas no solo deterioran el cuerpo, también rompen familias y dañan profundamente la vida social del consumidor", añadió.
El Centro de Rehabilitación Fe, Esperanza y Amor ofrece un enfoque integral que combina el acompañamiento profesional con el apoyo espiritual, brindando una alternativa real para romper con el ciclo de la adicción y recuperar una vida plena.