Perdió la vida mientras realizaba labores de mantenimiento a una pipa que se incendió.
Por: Gerardo Martínez
Armando Villastrigo fue reconocido por su trabajo como soldador a nivel internacional, trabajó en plataformas petroleras y otros proyectos, en los que llevó en alto el nombre de México, una persona que amaba lo que hacía y que siempre fue una persona amable y servicial.
Así fue como sus familiares describieron a Armando Villastrigo, quien lamentablemente perdió la vida luego del accidente que se registró mientras realizaban labores de mantenimiento al interior de una pipa.
Debido a las lesiones que sufrió tras el incendio, Armando Villastrigo falleció el viernes por la noche, y el día de ayer fue sepultado, en donde estuvo acompañado de amigos y familiares.
Rigoberto López Castillo, hijo de Armando, señaló que era una persona servicial, muy respetuoso, amoroso con sus hijos, nietos y bisnietos, una persona que no lo decía que "no" a nadie, siempre dispuesto a apoyar a los demás.
Amante de los bochos, por lo que incluso el día de ayer, en el sepelio se decoró su auto, con arreglos florales acompañándolo hasta su última morada.
Mencionó que su padre amaba su trabajo, recordó que él siempre le decía que tenía que buscar un trabajo que amara hacer, por lo que dijo que "él estuvo haciendo lo que amaba hasta el último día de su vida".
Señaló que incluso su padre fue reconocido a nivel internacional por su trabajo como soldador, trabajando en plataformas marítimas en Estados Unidos, trabajó con alemanes, europeos, y llegó a ser jefe de todos ellos.
"Levantó la bandera de México, era el mero machín allá en Estados Unidos".
Por desgracia sobrevino el accidente, que le costó la vida a la edad de 69 años de edad, y dejó a su esposa, tres hijos, 9 nietos y 4 bisnietos.
Dijo que, tras el accidente, el propietario de la empresa Grupo Monaz estuvo al pendiente del estado de salud, en el hospital Saint Marie y tras el deceso, se ha hecho responsable de los gastos, así como de lo que por ley le corresponde.