El Rey Carlos III busca preservar la imagen de la Corona al retirar títulos al Príncipe Andrés.
Por: Staff / La Voz
El Rey Carlos III ha tomado una medida contundente para cerrar el capítulo del escándalo que involucra a su hermano, el Príncipe Andrés, con el pederasta convicto Jeffrey Epstein. Este jueves, 30 de octubre, se anunció el inicio del proceso formal para retirarle todos sus títulos y honores, y notificarle que debe abandonar la lujosa mansión de Royal Lodge en Windsor.
La decisión del jefe de Estado británico llega tras semanas de intensa presión pública y política, que exigían una acción definitiva sobre el miembro de la realeza cuya reputación ha sido minada por su estrecha y prolongada amistad con Epstein, incluso después de que se conocieran los abusos sexuales a menores cometidos por el magnate.
Adiós a los Honores y al Título de Príncipe
El Palacio de Buckingham emitió un comunicado confirmando las acciones iniciadas por el monarca. La medida implica la pérdida de todos los honores militares y patronatos que Andrés había recibido a lo largo de su vida. Lo más significativo es que perderá el título de Príncipe con el que nació, así como el de Duque de York, concedido por la Reina Isabel II en 1986.
A partir de ahora, el hermano del monarca será conocido simplemente como Andrés Mountbatten Windsor.
"El Rey ha iniciado un proceso formal para retirar los títulos y honores del príncipe Andrés, y se le ha notificado formalmente que debe entregar su contrato de arrendamiento en Royal Lodge, en Windsor," señala el comunicado de Palacio.
Las autoridades reales insisten en que estas acciones eran necesarias, a pesar de que Andrés continúa negando las acusaciones de abuso sexual en su contra por parte de Virginia Giuffre. La Familia Real ha querido dejar claro que sus pensamientos están con las víctimas y supervivientes de cualquier forma de abuso.
Andrés Pierde su Residencia en Royal Lodge
El escándalo también se centró en la residencia del príncipe, Royal Lodge, una mansión de 30 habitaciones que fuera el hogar de la Reina Madre. Durante más de 20 años, Andrés vivió allí prácticamente sin pagar alquiler, mientras su nombre seguía asociado a Epstein.
Aunque el Príncipe Andrés se había mostrado reacio a dejar la propiedad, pidiendo una compensación económica por los fondos invertidos en su arreglo, se le ha notificado formalmente que debe entregar el contrato de arrendamiento. Los medios británicos sugieren que se trasladará a una residencia privada alternativa en Sandringham, que será costeada por el Rey.
Las hijas de Andrés, Beatriz y Eugenia, conservarán sus títulos de princesas, al tener derecho a ellos por ser nietas de Isabel II. Con esta drástica decisión, el Rey Carlos III busca preservar la imagen de la Corona y alejar definitivamente a la monarquía del polémico vínculo con Jeffrey Epstein.