Lo perdieron todo

Lucero Esmeralda Ovalle señaló que tuvo que salir a la despensa cuando recibió la llamada de que algo grave pasaba en su hogar

Por: Mónica Meza

Consternada aun por lo que pasó, Lucero Esmeralda Ovalle narró lo que ocurrió esa tarde cuando recibió una llamada telefónica en la que le avisaron que su casa estaba ardiendo en llamas, adentro estaban su padre y sus dos hijos, los cuates, una niña y un niño de 4 años de edad.

Fue la tarde del martes cuando se dio a conocer la lamentable noticia, una vivienda de la colonia Las Esperanzas era consumida por el fuego, en el interior estaban los pequeños y Héctor Ovalle un hombre de la tercera edad que no podían salir pues las puertas de atrás y adelante estaban cerradas con llave, el abuelo no podía bajar las escaleras por el impacto que le causó lo que estaba pasando.

Afortunadamente los vecinos lograron auxiliarlos, posteriormente llegó personal de Protección Civil y Bomberos e hicieron lo correspondiente, lograron sacar a los pequeñitos que milagrosamente estaban ilesos, también sacaron a Héctor Ovalle quien presentaba quemaduras de tercer grado por lo que fue trasladado a la clínica 7 del IMSS, su estado de salud se reporta como delicado.

Lucero Esmeralda Ovalle señaló que tuvo que salir a la despensa, mencionó que siempre procura que los niños estén dormidos y bajo el cuidado de su padre, es decir del abuelo de los niños, todavía no sabe qué fue lo que pasó.

Recuerda que terminó de hacer la despensa, estaba por pagar, hablaba por teléfono con su madre cuando le dijo que iba a pagar y colgó, en eso su madre le empezó a marcar insistentemente ella le contestó y le dijo que iba a pagar, pero su mamá, le dio la mala noticia, le dijo que se fuera porque la estaba buscando la policía, que no se acercara, que había pasado algo en su domicilio, pero no le dijeron bien lo que ocurrió.

“No sabía ni que hacer, para dónde ir, salí del súper y me fui corriendo hasta la 57, ni siquiera pagué las cosas, las aventé, ahí las dejé”, comentó llorando al recordar esa terrible experiencia, cuando regresó ya no estaba ni sus hijos ni su padre.

Se asustó mucho, es la peor experiencia que ha vivido, tras la llamada de su madre, le empezaron a marcar vecinos que ni siquiera sabía que tenían su número, todos le decían que no se acercara porque tendría problemas.

“Mi papá camina muy despacio, no está invalido él se queda en la parte de arriba y yo le llevó lo que necesita para que no baje, los cuates abren la puerta y empujan a papi para que los lleve a pasear, él no está invalido tal vez no pudo reaccionar por el impacto, quedó en shock, esto que pasó fue un accidente que se pudo evitar sí, pero a todos nos puede pasar”, señaló Lucero Esmeralda.

Señaló que lo bueno dentro de todo lo malo es que sus hijos están bien, aunque la Pronnif intervino, como quiera estarán con ella, bajo el cuidado de su abuela paterna, a quien agradeció por el apoyo que le ha brindado siempre.

Señaló que ahorita la prioridad es su padre quien está hospitalizado, inicialmente sus hermanos lo cuidaron, pues Lucero atendía el llamado de la Pronnif.

Ya tiene un lugar para poder vivir, estará muy cerca de la vivienda de su ex suegra, para estar al pendiente de sus hijos pero al mismo tiempo de su padre.

Mucha gente que conoce a Lucero y quienes no también, la han criticado, pero nadie sabe cómo ella le ha hecho para sacar a sus hijos adelante y al mismo tiempo atender a su padre, solo quienes la conocen de verdad saben sobre su vida, ella mencionó que aunque cometió el error de dejarlos encerrados jamás fue con la intención de ocasionarles un mal, todo fue un accidente. 

Trascendió de acuerdo a un informe de Protección Civil y Bomberos que el incendio fue ocasionado por un corto circuito, inició en la sala comedor y se extendió a la planta alta de la vivienda.

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