Por: Gerardo Martínez
Rompiendo con los estereotipos y con las barreras que durante muchos años han existido en el ámbito laboral, Lourdes Chávez Villanueva decidió cambiar la comodidad del escritorio, colocarse zapatos de seguridad, chamarra antiflama, casco y convertirse en la primera mujer montacarguista de Altos Hornos de México.
Tras 10 años de laborar para la empresa siderúrgica, Lourdes Chávez decidió dar un paso más en su formación laboral, en parte impulsada por la necesidad, pero también del deseo de seguir creciendo.
Dice estar lista para enfrentar nuevos retos.
Lourdes se desempeña en el área de Almacén General de la Planta 2, como Inspectora de Recibidor, en donde tiene que ingresar los materiales que llegan desde un lápiz, hasta el Alto Horno.
En entrevista comentó que en muchas ocasiones se enfrentó a que no tenía cómo mover los materiales que llegaban debido a que los montacarguistas estaban ocupados y le decían que se tenía que esperar.
Esta situación la motivó a aprender a operar la maquinaria para ser ella quien moviera los materiales en caso de ser requerirlo y no tener que esperarse y tampoco afectar el proceso de producción.
Para poder operar un montacarga se requiere de una licencia especial, por lo que levantó la mano para que la incluyeran dentro de la capacitación para operadores, recibiendo el apoyo de sus superiores y de la empresa.
Señaló que hubo algunos comentarios de personas que decían que no iba a poder, lo que la motivó a seguir adelante y demostrar que era capaz de hacerlo, manejar esta maquinaria y realizar el trabajo como cualquier persona.
Mencionó que al inicio fue difícil ya que ella solo manejaba estándar y le era extraño operar todo con un solo pie, además de que la ubicación de las palancas que en un inicio la llegaban a confundir.
Lourdes Chávez Villanueva decidió cambiar la comodidad del escritorio, colocarse zapatos de seguridad, chamarra antiflama, casco y convertirse en la primera mujer montacarguista de Altos Hornos de México.
“Batallé porque no se manejar automático solo estándar, se me dificultó hacer las maniobras con un solo pie, también las palancas porque yo quería poner direccional, pero empezaban a sonar las alarmas de la reversa”.
Tras un mes de capacitación aprobó el curso y se convirtió en la primera montacarguista de la empresa, lo que la llena de orgullo y emoción al saber que pudo realizar este reto, y que ahora la impulsa a seguir aprendiendo en otras áreas como pailería y soldadura.
Lourdes es Licenciada en Informática egresada del Tecnológico de Monclova, y algunos le han hecho el comentario de porque se interesa en ser montacarguista si ella cuenta con una profesión, a lo que señala que no es un puesto bajo, no le da da vergüenza, al contrario, dijo que es un orgullo el poder realizar este trabajo.
Señaló que es un orgullo pertenecer a la empresa y que le den este tipo de oportunidades, y dijo estar lista para los retos que vengan más adelante, ya que es una persona que le gusta estar aprendiendo día a día.