Verónica López Moreno falleció quien se desempeñaba como trabajadora Social del DIF Monclova, falleció la noche del jueves por complicaciones de salud
Por: Teddy Fuentes
MONCLOVA., COAHUILA.-Era tan grande el amor de mi madre por la gente que menos tiene que trabajó intensamente por apoyarlos y ayudarlos a salir de sus necesidades, a nosotros su familia nos amó hasta su último aliento, dejándonos un legado de amor, solidaridad, pero sobre todo trabajo para el bien de los demás.
Verónica López Moreno falleció quien se desempeñaba como trabajadora Social del DIF Monclova, falleció la noche del jueves por complicaciones de salud, pero vivirá en el corazón de todas las personas a quienes apoyó en vida con su trabajo y gestiones, pues siempre estuvo de lado de las personas que tenían alguna necesidades para apoyarles de alguna manera con donaciones, recursos e incluso con su presencia y cariño, pues era de esas mujeres que con un abrazo te daban fe y esperanza en un mejor mañana.
Paulina Hernández López, hija de “Verito” como cariñosamente la llamaban sus seres queridos, aseguró que su madre siempre fue una persona que cuidó mucho su salud, pues si bien padecía hipertensión y diabetes, no fue eso la causa de su fallecimiento, pues aunque le realizaron múltiples estudios no dieron con la razón de su partida.
Mi madre se comenzó a sentir mal el pasado viernes, consultamos con varios médicos pero no dieron con lo que le pasaba, así que cuando sus fuerzas la abandonaron, nos pidió que la lleváramos a internar para que la atendieran de mejor forma, siempre tuvo fe en que iba a salir adelante, incluso en el hospital nos pedía que le contestáramos las llamadas y respondiéramos a las necesidades de la gente, ella estaba muy feliz en su trabajo ayudando a los más necesitados.
Paulina dijo que como madre fue la mejor de todas, pues nunca dejó que el cansancio la venciera y entre trabajo y trabajo, llegaba con sus hijos para apoyarlos con las tareas, escucharlos pero sobre todo abrazarlos y darles mucho amor.
“Mamá y papá hicieron un buen trabajo con nosotros, mi papi Alfredo Hernández Uribe tenía 23 años casado con mamá, él la quería mucho y ella fue una gran mujer, por lo que vamos a darle todo el apoyo y sobre todo mucho amor, porque será muy difícil vivir sin ella”.
El padre de Verónica no pudo ocultar su dolor al hablar de su hija a quien catalogó como una súper mujer que siempre trabajó para sacar adelante a su familia y al mismo tiempo sacaba fuerza y tiempo para darles amor a él y a su madre.
“MI hija trabajaba mucho, pero los domingos estaban dedicados a dios y a nosotros sus padres, no sé qué vamos a hacer sin ella, era la alegría de nosotros y de sus hermanos, era quien mantenía unida a la familia y en las fiestas nos hacía reír mucho, nunca pensamos que se iba a ir así de forma repentina”.
Los familiares de Verónica, mencionaron que siempre vivió su vida al máximo, pues aunque sus jornadas de trabajo iniciaban desde muy temprana hora, nunca dejaba de lado el amor y la atención para sus hijos, esposo, padres y hermanos, a quienes les brindó mucho amor y siempre estuvo pendiente de ellos.
“Vero es de esas personas muy difíciles de superar, su esencia y su presencia nos va a hacer mucha falta a todos quienes la quisimos, es de esas mujeres que dejan huella en todas las personas, pero gracias a su bondad y vocación de servicios, estamos seguros de que dios la tendrá a su lado, protegiéndola y dándole mucho cariño, se nos fue una gran mujer, pero ahora tenemos un ángel que estará con nosotros brindándonos cuidado y amor desde el cielo.