Aseguran que la notificación de la presentación del menor venía a nombre de la madre, María.
Por: Diana Ortiz
Los directivos del Centro de Rehabilitación Vibe, Cuauhtémoc Villanueva Mata como director y Brenda Berenice Narváez Salazar como propietaria, enfatizaron que en ningún momento incurrieron en desacato con la PRONNIF, ya que la notificación que recibieron de la asesora estaba dirigida a la madre de Jonathan, Marimar Alejandra Morales Sánchez.
"El contrato que establecimos fue con la madre responsable del menor, lo que nos obligaba a entregar al menor a la persona responsable de su internamiento, y eso fue exactamente lo que hicimos", afirmaron.
Aseguraron que no se negaron a cooperar, ya que cuando la madre se presentó para recoger al menor y llevarlo ante la PRONNIF, lo entregaron siguiendo el protocolo establecido, que incluía revisión médica y física.
Respecto a la postura de la madre de que su hijo fuera atendido en el centro de rehabilitación, Villanueva señaló que "ella y su pareja se sentían incapaces de atenderlo, ya que el menor había sobrepasado sus acciones, pero, respetando la autoridad, decidieron presentar a su hijo ante la dependencia".
Sobre el tema de los anexos y la presencia de menores de edad, Villanueva expresó: "No puedo confirmar si existen contradicciones. La normativa 028 que regula los centros de rehabilitación y centros de adicciones nos lo permite".
En cuanto a las condiciones dentro del centro, mencionaron que los menores cuentan con habitaciones separadas, baños individuales, atención médica y psicológica individualizada, así como actividades escolares.
Además, ofrecen oportunidades educativas, incluyendo la colaboración con instituciones para facilitar el material de trabajo a aquellos que están cursando algún nivel educativo.
Subrayaron que el derecho de los menores es inalienable, pero también enfatizaron que las familias tienen derecho a buscar ayuda cuando se sienten rebasadas.
Por ello, el centro cuenta con un programa familiar que consta de aproximadamente 26 pláticas que abordan diversas fases del proceso de rehabilitación, desde el internamiento hasta la recuperación.
En relación con la regulación y certificación del centro, destacaron que son el único centro en la zona urbana que abarca Castaños, Monclova, Frontera y San Buenaventura que posee todos los permisos necesarios y cuya documentación está en regla.
Asimismo, son el único centro con autorización de la Secretaría de Salud y el Consejo Estatal contra las Adicciones para obtener la certificación. Además, señalaron que fueron los únicos invitados al Curso Nacional de Capacitación para Consejeros en Adicciones, desde la zona centro hasta la frontera, incluyendo Acuña y Piedras Negras.