Pide el Presidente que el empresario permita la llegada de nuevos inversionistas.
Por: Gerardo Martínez
El Presidente de la República aseguró que Alonso Ancira Elizondo se niega a dejar Altos Hornos de México y por eso no se ha concretado la inversión que permita reactivar a la empresa, por lo que invitó al “rey del acerero” para que permita la llegada de los nuevos inversionistas.
En la conferencia mañanera del día de ayer, el Presidente Andrés Manuel López Obrador tocó el tema de AHMSA y la problemática que enfrenten miles de personas que dependen de la empresa.
Señaló que están conscientes de la situación que existe, pero mencionó que esto se debe a que Alonso Ancira se niega a entregar la empresa a otros inversionistas, por lo que da largas al proceso.
Indicó que a pesar de las deudas que tiene la empresa y que conforme pasa el tiempo se incrementan, Ancira Elizondo no ha llegado a ningún acuerdo con los inversionistas y no firma para entregar la empresa y que los nuevos dueños se hagan cargo de las deudas y que inviertan dinero fresco.
Comentó que hay muchas personas interesadas en adquirir la empresa acerera, al ser una empresa rentable, con gran futuro, con el desarrollo que se tendrá con el tratado de libre comercio con Estados Unidos y Canadá.
Señaló que AHMSA es una empresa con futuro, siempre y cuando se resuelva la parte administrativa y lleguen nuevos empresarios.
Es por eso que incluso se giró instrucciones al Secretario de Hacienda para que tenga acercamiento con los empresarios acereros del país, para ver quienes están interesados en adquirir la empresa.
El Presidente de la República, indicó que incluso como Gobierno, están dispuestos a dar facilidades para que la empresa se venda, en donde si bien no condonará la deuda que se tiene, se podrá reestructurará y dará facilidades a quien esté interesado en comprarla con el fin de que la empresa vuelva a operar.
Sin embargo dijo que esto dependerá de la actitud de Alonso Ancira, por lo que hizo un llamado para que recapacite y facilite las cosas y piense en los trabajadores, porque si se apuesta a los juicios, la planta se va a perder.