La manifestación que incluyó pintas y daños en monumentos, dividió opiniones.
Por: carolina salomon
Lo que inició como una marcha pacífica en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, con el objetivo de exigir justicia, igualdad y un alto a la violencia de género, terminó en una serie de actos de vandalismo, incitaciones a la violencia de manera verbal contra las policías e intentos por coartar la libertad de expresión de reporteras que documentaban los hechos.
La manifestación, denominada "Mujeres Apoyando Mujeres", fue organizada por el colectivo Sororidad Monclova y reunió a poco más de 200 mujeres.
Durante el recorrido, que comenzó a las 17:00 horas a la altura del boliche por el bulevar Harold R. Pape hasta la plaza El Magisterio, las asistentes portaban prendas moradas y verdes, pancartas con mensajes contra la violencia de género, el acoso, las desapariciones y los feminicidios.
Aunque la convocatoria estaba abierta a los hombres, su participación fue escasa, acudiendo solo los familiares de víctimas.
A su llegada a la plaza, se realizaron diversas actividades, entre ellas un micrófono abierto donde mujeres compartieron testimonios de violencia y abuso.
También se instaló un "tendedero" con imágenes de víctimas de feminicidio y desaparición, así como un "muro de la vergüenza", donde algunas asistentes denunciaron a sus presuntos agresores con fotografías y nombres.
Sin embargo, el movimiento tomó un giro violento cuando algunas manifestantes comenzaron a lanzar comentarios un poco violentos hacia las mujeres policías que resguardaban la seguridad del evento.
A pesar de los intentos de provocación, las oficialas de la Policía Violeta, de la PAR, de la PCC, y Seguridad Pública, se mantuvieron en calma y no respondieron a las agresiones verbales.
Los actos de vandalismo se intensificaron con pintas y daños a monumentos, incluyendo la figura del profesor Cuauhtémoc Cortez y el busto de Ernesto de la Fuente Jiménez, los cuales fueron cubiertos con grafitis y manos marcadas en colores morado, negro y rojo.
Algunas jóvenes incluso treparon sobre ellos para pegar carteles y cinta, sin considerar el riesgo de sufrir una caída.
Cabe mencionar que dichas figuras fueron envueltas con plástico, cartón y papel desde el viernes para evitar que fueran vandalizados pero las feministas procedieron a retirarles el material para así llevar a cabo sus actos vandálicos.
Un momento de especial tensión se vivió cuando una mujer intentó impedir que reporteras documentaran los hechos, coartando su libertad de expresión. Afortunadamente, elementos de la policía estatal intervinieron para evitar una mayor confrontación.
La manifestación dejó diversas opiniones en la ciudad, con posturas divididas entre quienes defienden el derecho a la protesta y quienes critican los actos de vandalismo ocurridos durante la jornada.
El colectivo terminó cantando la canción "Vivir sin Miedo", que se ha convertido en un himno de las feministas y refleja la grave violencia hacia la mujer que se vive en el país, así como el coraje para hacer frente a estas situaciones.