Una vida de película

Por: Agencia

Hay lugares que quedan marcados en la vida de las personas por algún acontecimiento importante que ocurrió ahí, o simplemente porque nos agrada estar en ese sitio; nos gusta tanto que se hace parte de nosotros y ya no se puede concebir uno sin el otro. Esto pasó con el señor José Preciado y con el Cine Azteca (o Cineplex, Cinema Río)

Desde niño, José Preciado se interesó por los cines. Esos lugares imponentes, llenos de asientos, en silencio, a oscuras, que aguardaban el momento perfecto para proyectar películas que se convertirían en horas de entretenimiento para cientos de personas. Tiene mucho sentido que José Preciado amara este lugar.

Desde niño, José Preciado se interesó por los cines.

Lo amó tanto que se convirtió en su pasión. Pasaba horas enteras ahí. Fue por eso que el señor Armando Villarreal, atraído por ese amor que sentía José, lo inició en el negocio del cine. Primero, repartiendo volantes y pegando carteles en los postes que anunciaban las funciones. Después, dentro del cine como administrador. Así transcurrieron más de 40 años. Su hijo, José Armando Preciado Villarreal, dijo para “La Voz”:

“El dueño del cine Azteca, le agarró cariño a mi papá. Entonces mi papá empezó desde abajo y así logró ganarse la confianza de la familia Villarreal y lo nombraron gerente administrativo del Cine Azteca que después fue el Cineplex y para ser Río Cinema-Azteca.

Sala del Cineplex Azteca durante su inauguración.

Al final, en total fueron más de 40 años al servicio de este cine. Este cine era su vida, pero cuando decimos cine no nos referimos al arte en sí, sino a este edificio, y este oficio, él amaba ser el encargado de esta sucursal por eso dedicó su vida por completo. Llegaba desde las 8 de la mañana, se iba a almorzar y volvía, y ya no se iba hasta que cerrábamos.”

José Ubaldo Preciado Borreo, nació un 16 de mayo de 1949 en Escobedo, Coahuila. Y dejó este mundo el 9 de abril del presente año a la edad de 70 años. Dejando también vacío un gran espacio en el Cinema Río de Monclova. Quienes ahí trabajan lo recordarán por siempre como alguien dedicado a su trabajo.

El Cine Azteca, como el Cineplex y el Río Cinema-Azteca, es un lugar que para José Preciado, como para todos, representa un recuerdo. Sin el arduo trabajo del señor Preciado, muchos monclovenses no hubiéramos tenido la oportunidad de disfrutar de un cine accesible en Monclova. Como homenaje se presentan enseguida algunos relatos de personas que recuerdan con cariño al Cine Azteca.

Chuy Garza: xAhí fui a ver el episodio 1 de Star Wars. Y me acuerdo cuando eran 3 películas por 20 pesos o algo así. Pero entrabas a 3 por bien poquillo.

Inauguración de Cineplex Azteca.

Lucero Chamé: Era mi primera vez de visitar el cine cuando lo remodelaron, al salir de la película, (era la última función) la puerta principal ya estaba cerrada así que dieron salida por la lateral. El chico del cine dijo “por aquí” y empezó a caminar. Yo lo seguí hasta que vi que el chico iba atravesando tuberías y cosas y que el espacio claramente no era hacia el estacionamiento sino hacia la parte de atrás, entonces voltee hacia mi espalda y el resto de la gente iba en la otra dirección. Me di la vuelta rápidamente. La literal me dicen.

Ricardo García: Fue la primera vez que recuerdo un cine, vi con mi mamá y mi hermano a ver Power Rangers The Movie, y Caballeros del Zodiaco la guerra de los dioses, es un bonito recuerdo y un regalo de cumpleaños de mi mama para mí, fuimos caminando desde nuestra casa, amo mucho a mi jefa por eso y más.

Ramones Tupatupa: En mi niñez vivía a unas calles de ahí, así que vi el estreno de Las Tortugas Ninja, el Karate Kid, Robocop (que no era para niños), Bettlejuice y muchas más!! Los domingos de matiné entraba con un cupón recortado del periódico y mi mamá me echaba taquitos, Galletas y una soda en un morralito que siempre me dejaron pasar.

Ramones Tupatupa: También recuerdo que la gente hizo una fila enorme para ver La Bamba...

David Loera: Fue mi primera cita hace mas de 10 años con quien hoy es mi esposa... Después ya casados nuestro primer hogar fueron los departamentos justamente a un lado de ese cine…

Roger Moreno Olvera: Ahí fue mi graduación de primaria en el imponente Azteca de una sola sala.

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