Por: Agencia
La empresa Remy, fabricante de alternadores y arrancadores automotrices, comenzó a liquidar a 565 trabajadores sindicalizados y de confianza este viernes 14 de junio, con montos que van de los 10 a los 90 mil pesos, de acuerdo a los puestos y su antigüedad, con una derrama superior a los 80 millones de pesos.
Sarita Mijares, dirigente sindical de la Confederación Revolucionaria Obrero y Campesina (CROC), confirmó el cierre de la planta, aduciendo que fue por cuestiones de negocios del corporativo.
La liquidación se realizó este mismo viernes.
Hoy sábado y domingo, docenas de trailers comenzarán a sacar todo el equipo de la nave industrial -que rentaban a la familia Juaristi en el Parque Industrial Aeropuerto- con destino a Tamaulipas.
Ayer mismo, la presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, Sarita Mijares, Mónica Lucía Flores Valdés y un actuario, dieron fe de los finiquitos conforme a derecho.
Flores Valdés, declinó proporcionar información, porque dijo le corresponde a la empresa, no a la Junta.
Sin embargo, la lideresa Sarita Mijares, dos veces regidora del Ayuntamiento por la CROC, reiteró el cierre.
“A nadie le gusta que Remy se vaya, pero es decisión de los inversionistas que buscan donde pueden estar mejor”.
Adelantó que la empresa se va a Reynosa, donde pretenden reunir a todas sus plantas.
Finalmente dijo que los montos de liquidación son variables y van de 10 mil a casi 100 mil pesos, dependiendo del tiempo laborado y su puesto.
“Hubo un poco más de dinero de lo acordado para cada trabajador, como agradecimiento de la empresa”, indicó.
BATALLAN PARA COBRAR
Este mismo viernes en un recorrido por las diferentes sucursales de Banorte, se pudo observar a cientos de trabajadores, aún con el uniforme de Remy, haciendo fila para cobrar su dinero.
Hubo algunos inconformes por el finiquito y otros por la tardanza para cobrar en bancos.
Otros se quejaron porque no pudieron cobrar sus cheques, debido a que existen diferentes firmas autorizadas.
SI HAY QUEJA SE INTERVIENE
Por su parte Francisco Javier Favela Hernández, Procurador del Trabajo, informó que la Subprocuraduría solo interviene cuando hay una queja del trabajador, en el caso del cierre de Remy y la liquidación de los obreros.
Reiteró que los sindicatos deben proteger al trabajador, verificando que se entreguen los montos correspondientes.
Sin embargo, advirtió que, una vez firmado el finiquito, el trabajador ya no podrá presentar queja alguna.
Remy cerró puertas luego de dos intentos fallidos.
Mónica Flores de la Junta, dijo que hablar de finiquitos por el cierre de Remy, no le corresponde a ella.
Francisco Javier Favela Hernández, de la subprocuraduría del Trabajo.