El arte de saber pintar

Por: Staff / La Voz

DORA ISELA DE LA CRUZ / LA VOZ

SABINAS, COAHUILA.- Ya sea con gis, lápiz, pintura de aceite, acrílica sea cual fuere el instrumento en las manos de María Antonieta Leza Santoy transforman una tela, cartón, madera, pared o piso en verdaderas obras de arte, su talento es innato porque dibuja desde que tenía 3 o 4 años.

Pudiera creerse que viene de una familia de artistas, sin embargo no es así, su mamá Santana Santoy no se dedicaba al arte sino a la costura, sin embargo a decir de la artista lo hacía muy bien en Nueva Rosita Coahuila, su padre se llamaba Juan Antonio Leza y era empleado de Hullera Mexicana, más bien heredó de su tía Josefina López el gusto por la pintura, ella dejó muchos cuadros al óleo que pintó durante toda su vida, también bordaba y en ocasiones bordaba con cabellos humanos en fundas, todo un arte.

Maria Antonieta Leza Santoy, nació en Nueva Rosita, se dedica formalmente a la pintura desde los 35 años.

María Antonieta nació en Nueva Rosita Coahuila, sin embargo tiene muchos años de vivir en Sabinas y empezó a dedicarse a la pintura formalmente desde los 35 años, solo tomó dos cursos en Monterrey uno para lápiz y otro técnicas de óleo.

Ha participado en varias exposiciones, una en la presidencia de Sabinas en la administración anterior donde alternó sus cuadros con fotografías de Anwar.

También en la Casa de la Cultura de Nueva Rosita, en la Secundaria Federal Fortunato Gutiérrez Cruz en donde alternó con otros artistas y caricaturistas locales.

Tiene María Antonieta 11 años participando en una exposición colectiva denominada Bellavia, artistas plasman sus obras en la explanada De los Héroes en Monterrey cada mes de octubre, es todo un espectáculo artístico.

Respecto a cursos sobre pintura en todas sus modalidades, la artista ha tenido cursos en verano combinando alumnos de Sabinas y Nueva Rosita, del 26 de junio al 13 de julio en la casa de Cultura de Nueva Rosita y su local que se encuentra en calle Madero en donde ha tenido hasta 35 alumnos.

Manifestó que eso la motiva mucho porque ella desea trascender y que los niños y jóvenes aprendan a través de ella, su sueño es poder exponer en el extranjero, que se conozca su obra para lo cual se prepara con nuevos cuadros, también quiere que se le recuerde cuando ella ya no esté como una artista plástica.

Sobre las clases que da a niños y jóvenes primero toma en cuenta la disciplina, luego hace una pequeña prueba de dibujo para percatarse de las habilidades de cada uno, luego los pone a trabajar sin prisa y sin presiones, no es bueno que se angustien por no poder hacer algo.

Le gusta pintar mujeres de diversas etnias y con distintas emociones.

En cuanto a su técnica dijo que es muy variada ha aprendido a utilizar diversos materiales y texturas, como el gis de colores, pintura de aceite, pintura acrílica, acuarela y sus cuadros están plasmados algunos en lienzo y otras sobre madera o cartón duro.

Comentó que le gusta mucho pintar personas hombres, niños pero sobre todo mujeres, tiene muchos cuadros de mujeres de diversas etnias, también tiene predilección por pintar indios americanos, también le gusta plasmar desnudos tiene algunas ideas para hacer un nuevo cuadro de desnudos femeninos.

Externó que primero se imagina las poses que pintará en las personas, es como si pintara primero en su mente, luces, sombras colores, le gusta la realidad por eso procura pintar mujeres con sus kilitos de más, llantitas o arrugas, la realidad primero.

Luego también cuando viaja ha visto imágenes que se quedan grabadas en su mente como el de una mujer de espaldas sentada frente al mar que próximamente plasmará en sus cuadros, toma las fotos y luego las reproduce.

María Antonieta señaló que su obra no fluye como debiera porque le falta un representante que le busque exposiciones y la relacione con casas de arte, cosas así, el espacio cultural de la región en ocasiones adopta artistas de fuera y se olvida de lo local y en otros casos esta desaprovechado, aún así ha tenido sus exposiciones.

En su experiencia como pintura ha conocido mucha gente y también artistas plásticos de Monterrey, recordó cómo llegó por primera vez a participar en la exposición colectiva Bellavia, conoció a un joven que coordinaba los trabajos y espacios de artistas el cual la acompañó cada vez que iba año tras año, recibió mucha motivación y ánimo de parte de él, sus ojos se rozan de lágrimas al recordar que luego él tuvo una enfermedad terminal y murió, siempre lo recordará como si fuera el Ángel que la animó a mejorar en la pintura y a no rendirse ante el talento de los demás, porque cada quien tiene el suyo, sabe que ella tiene el arte en sus venas, aunque pocos conozcan sus pinturas.

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