Por: Alma Flores
NUEVA ROSITGA, COAH.- “Mataron a mi hijo se llevaron parte de mi corazón” con el rostro desencajado y bañado en lágrimas, el padre del comandante solo acertó decir esas palabras cuando llegó al funeral de Hugo Isidro Ramos Cisneros que fuera ultimado a balazos en el Mineral de Palaú.
El único varón de la familia, el que siempre velaba por los intereses de todos, fue asesinado, los familiares piden a las autoridades policiacas que este crimen no quede impune y que se castigue a los culpables.
Lo recordaremos como el hombre alegre, excelente padre, hijo, hermano y esposo, dijo su mujer.
El cuerpo del comandante es velado en funerales Martínez ubicado en la avenida Guadalupe Victoria de la colonia Comercial de Nueva Rosita a donde llegaron algunos compañeros de la vieja guardia del acaecido.
Sus familiares no daban crédito a lo sucedido dijo una de las hermanas del comandante, que el día en que ocurrieron los hechos solamente les notificaron que su hermano se había puesto enfermo y que se encontraba en una clínica privada.
Hugo Isidro padecía de alta presión desde hace tiempo, y los familiares lo relacionaron con el mal que lo aquejaba, fueron las propias autoridades policiacas quienes les dieron a conocer la fatal noticia.
Por su parte la esposa de Hugo Isidro con llanto gritaba que lo estaba esperando para cenar ya que minutos antes se había comunicado con él y fue la última vez que platicaron ya que al paso de las horas volvió a marcarle a su teléfono celular y ya no le contestó.
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El comandante Hugo Isidro Ramos Cisneros contaba con 25 años de carrera policiaca, había momentos en que pensaba retirarse, pero su profesión la llevaba en la sangre, dijo la esposa.
Al jefe policiaco le sobreviven su esposa, tres hijos, su padre Isidro Ramos, sus hermanas, Nora Alicia, Rosa Dalia, Diana y Dolores Ramos Cisneros, el cortejo fúnebre será el día de hoy sin precisar la hora.