Anteriormente, las quejas se centraban en el tramo de Nueva Rosita a Allende, conocido por su deterioro severo
Por: Elizabeth Monroy
SABINAS, COAH.- Las constantes quejas sobre el deterioro de la carretera federal 57 han alcanzado un nuevo nivel, con empresarios de COPARMEX uniéndose a las voces que claman por una solución. Lauro Isac Castañeda Lozano, destacado empresario y miembro de COPARMEX, expresó la preocupación creciente dentro del sector empresarial por las condiciones deplorables de esta importante vía de comunicación.
"Las solicitudes para la reparación de la carretera federal 57 no son recientes, han sido constantes. Como grupo empresarial, hemos tratado de alzar la voz, ya que muchos de nuestros miembros, dedicados al transporte, dependen de esta carretera. Nuestros trabajadores, tráilers y camionetas transitan por la 57 diariamente, y la situación es insostenible. Personalmente, como comerciantes y empresarios, necesitamos trasladarnos a ciudades como Monterrey y Monclova, y el tramo de Sabinas a Monclova está en un estado crítico que ya ha provocado varios accidentes", explicó Castañeda Lozano.
Anteriormente, las quejas se centraban en el tramo de Nueva Rosita a Allende, conocido por su deterioro severo. Sin embargo, el problema se ha extendido, alcanzando tramos que conectan Sabinas con Monclova. La falta de mantenimiento ha incrementado el riesgo de accidentes, lo que ha llevado a los empresarios a tomar medidas más contundentes.
"Presentamos una petición hace unos meses solicitando la reparación de un tramo específico. Entregamos esta solicitud a los alcaldes de la región carbonífera, buscando su apoyo para reforzar nuestra petición. Estamos esperando una reunión con el gobernador, entendiendo que la carretera pertenece a la federación, pero necesitamos que se le preste atención inmediata para evitar más incidentes que pongan en riesgo a nuestros trabajadores y ciudadanos en general", añadió.
Además del deterioro del pavimento, la falta de iluminación y señalización son factores que agravan la situación. "Hay puntos específicos en la carretera donde la visibilidad es casi nula, no hay señalización, y los foráneos se desorientan, especialmente en áreas como 'Las Capillas', cerca del tecnológico. El tramo entre los kilómetros 121 y 122 es particularmente peligroso, con numerosos accidentes fatales registrados", puntualizó Castañeda Lozano.
Aunque se han visto cuadrillas trabajando en algunos sectores de la carretera, los empresarios consideran que los esfuerzos son insuficientes. "Lo que hemos visto son trabajos superficiales, tapando baches, pero la carretera necesita un enfoque más profesional. La reparación debe ser integral, no solo parches temporales", declaró.
La situación es particularmente grave en el tramo de Nueva Rosita a Allende, donde, según Castañeda Lozano, "si no se pueden hacer dos carriles, al menos se debería ampliar el acotamiento. Es una zona de alto tránsito de camiones carboneros, y aunque se les ha prohibido circular por la 57, las condiciones de la autopista no son mejores. Las empresas y la ciudadanía que dependen de esta vía libre están expuestas a un alto riesgo de accidentes".
En conclusión, los empresarios de COPARMEX hacen un llamado urgente a las autoridades para que se tomen medidas serias y efectivas en la reparación de la carretera federal 57, antes de que las condiciones empeoren y se cobre más vidas. "El problema se está agravando, y si no se actúa pronto, las consecuencias serán desastrosas para todos", concluyó Castañeda Lozano.