Propietarios claman por más seguridad mientras las autoridades intensifican patrullajes.
Por: Elizabeth Monroy
SABINAS, COAH.- Se registró un robo y daños en un establecimiento en la calle Zaragoza y Epifanio Ramos, en la zona centro de Sabinas, convirtiéndose en el quinto negocio "visitado" por ladrones bajo el "modus operandi" del cristalazo. El ataque se llevó a cabo en una cafetería, donde los delincuentes lograron ingresar al dañar el cristal de la puerta principal. Este tipo de robos ha afectado gravemente a la comunidad empresarial local, sembrando temor y desconfianza entre los propietarios de negocios.
Los propietarios de la cafetería denunciaron el incidente a través de las redes sociales, pidiendo la colaboración de la comunidad para identificar a los responsables. "Estamos desesperados. Necesitamos la ayuda de todos para detener esta ola de robos. Si alguien vio algo o tiene información, por favor, que lo reporte a las autoridades," mencionaron en su publicación.
La comunidad ha respondido con mensajes de apoyo y solidaridad, pero también con creciente preocupación por la seguridad en la zona. "Esto no puede seguir así. Necesitamos más vigilancia y patrullaje, especialmente durante la noche," comentó un residente local.
Este es el quinto negocio en ser blanco de los ladrones en las últimas semanas, utilizando la misma técnica del cristalazo para ingresar y robar. Ante la creciente preocupación, las autoridades locales han prometido intensificar las patrullas nocturnas y coordinarse con la comunidad para mejorar la seguridad en la zona centro.
Estos incidentes subrayan una preocupante tendencia de criminalidad en la región, afectando tanto a pequeños comercios como a grandes establecimientos. La técnica del cristalazo se ha convertido en una herramienta común entre los delincuentes, quienes aprovechan la fragilidad de las estructuras de vidrio para ingresar rápidamente y perpetrar sus robos.
El impacto económico de estos robos es significativo, especialmente para los pequeños negocios que ya enfrentan desafíos económicos. Los daños materiales y la pérdida de bienes representan un golpe duro para los propietarios, quienes deben cubrir los costos de reparación y reposición.
Las autoridades recomiendan a los negocios locales implementar medidas de seguridad adicionales, como la instalación de cámaras de vigilancia, sistemas de alarma y el reforzamiento de puertas y ventanas. También se ha sugerido la creación de un grupo de vigilancia vecinal para monitorear la actividad sospechosa y reportarla de inmediato.