El Colegio Plancarte y Labastida promueve el arraigo a las tradiciones sabinenses desde la infancia
Por: Carlos Macias
Con alegría desbordante y espíritu festivo, los niños del preescolar del Colegio Antonio Plancarte y Labastida protagonizaron una emotiva representación de la tradicional cabalgata sabinense. La calle Madero del centro de la ciudad se transformó en un escenario lleno de color, música y tradición, donde los más pequeños rindieron homenaje a una de las celebraciones más arraigadas en la identidad local.
Ataviados con sombreros, botas y caballos de palo, los pequeños "vaqueros" y "vaqueras" recorrieron un circuito que fue acompañado por los aplausos de padres de familia y docentes, quienes celebraron con entusiasmo la creatividad y el compromiso de los niños. El ambiente se llenó de risas, música norteña y el orgullo de ver a las nuevas generaciones abrazar sus raíces.
La actividad, organizada por el personal docente como parte de las dinámicas culturales del colegio, tuvo como objetivo fomentar el sentido de pertenencia y el conocimiento de las tradiciones sabinenses desde la infancia. Más allá del juego, se trató de una experiencia educativa que permitió a los niños conectar con la historia de su comunidad de forma vivencial y significativa.
"Queremos que nuestros alumnos crezcan conociendo y valorando lo que representa la cabalgata para Sabinas. Es una tradición que une a las familias, que habla de nuestra tierra y de quienes la han forjado", expresó una de las maestras encargadas del evento, destacando el papel de la educación en la preservación cultural.
Con esta representación que finalizó en la plaza principal, el Colegio Antonio Plancarte y Labastida reafirma su compromiso con la formación integral de sus estudiantes, combinando el aprendizaje académico con el fortalecimiento de la identidad local. La cabalgata infantil no solo dejó huella en los corazones de los asistentes, sino que sembró en los niños el amor por sus tradiciones y el orgullo de ser parte de Sabinas.