Por: Agencia
Rusia.- Una mujer asesinó a su esposo tras una terrible discusión y durmió junto al cuerpo, hasta que el olor que desprendía la obligó moverlo al sótano, así lo dieron a conocer medios locales.
Las autoridades informaron que el asesinato ocurrió a finales del pasado mes de mayo en Kazán, Rusia.
Los medios dijeron que la pelea se dio mientras la pareja se encontraba bajo los efectos del alcohol.
Se dice que en medio de la discusión, la mujer tomó un cuchillo y le dio un golpe al hombre en el cuello, lo cual provocó una fractura en las vértebras cervicales y una muerte inmediata del hombre.
Después del asesinato, trasladó el cuerpo de su pareja a la cama y terminó acostándose a su lado durante varios días, como si nada hubiera ocurrido en el hogar.
Tras empezar a desprender un fuerte olor, la mujer tuvo que envolver el cuerpo del hombre con unas cortinas y lo movió al sótano de la casa.
Familiares de la víctimas fueron los que alertaron a las autoridades de su desaparición tras pasar una semana sin saber de él.
De forma inmediata los agentes policales se trasladaron a la vivienda donde encontraron el cadáver del hombre y averiguaron que la mujer había aprovechado el tiempo para vender cosas de valor de su pareja y dejar sin saldo sus tarjetas bancarias.
Actualmente la mujer se encuentra esperando su juicio por asesinato.
En Rusia han ocurrido hechos similares de mujeres que asesinan a sus esposos tras una terrible discusión.
Anteriormente, una discusión de pareja por el sabor de la comida que le ofrecieron a sus invitados terminó en una terrible tragedia en Rusia.
Luego que una mujer tomará la drástica decisión de apuñalar a su esposo 35 veces, asesinándolo delante de la hija de ambos de apenas 4 años, porque el hombre le reclamó que ponga más sal a los alimentos.
Slava Davydkin, de 43 años, y su esposa Evgenia Davydkina, de 31, invitaron a cenar a otra pareja a su casa y lo que era una tranquila velada entre amigos terminó de la peor manera, pues el hombre le reclamó a su cónyuge por el sabor de la comida una vez que sus huéspedes se retiraran a dormir, diciéndole "si me amaras le echarías más sal a la comida".
Slava además habría intentado golpear a su esposa. Por ello que Evgenia esperó que él se quedará dormido, para perpetrar el crimen con un cuchillo, que justamente había utilizado para preparar los alimentos, sin importar que en el lugar se encontraba su pequeña hija.