El periodista René Franco sigue en el centro de la polémica tras el incidente en el que despidió en vivo a su colaboradora Fernanda Ostos durante su programa.
Por: Staff / La Voz
El periodista René Franco sigue en el centro de la polémica tras el incidente en el que despidió en vivo a su colaboradora Fernanda Ostos durante su programa. La situación, que incluyó insultos hacia Ostos, generó una ola de críticas en redes sociales, señalando a Franco por su trato hacia la colaboradora.
Debate con Adela Micha
En una reciente aparición en el programa de Adela Micha, Franco abordó el tema, defendiendo su decisión y asegurando que no tuvo connotaciones misóginas o machistas. Sin embargo, la conversación se tornó acalorada cuando Micha cuestionó sus acciones, argumentando que el despido público fue un error, especialmente tratándose de una mujer.
Franco negó cualquier sesgo de género en su comportamiento, afirmando que trata a sus colaboradores de la misma manera sin importar su género. A pesar de esto, la discusión escaló cuando Franco mencionó acusaciones de un actor político cercano al oficialismo, desviando el foco de la conversación, lo que llevó a Micha a interrumpirlo en tono elevado.
Momento de tensión
La periodista no dudó en responder con firmeza:
"Cab***, aprende a escuchar, tú también."
Micha subrayó que las críticas hacia el comportamiento de Franco deben contextualizarse dentro de un entorno de violencia y discriminación histórica hacia las mujeres, conceptos que, según ella, podrían influir en las reacciones ante situaciones como esta.
Reacciones en redes
El intercambio entre ambos periodistas no tardó en viralizarse, dividiendo opiniones. Algunos usuarios defendieron la postura de Adela Micha, argumentando que Franco mostró una falta de empatía y profesionalismo. Otros, sin embargo, apoyaron al periodista, señalando que su decisión no debía politizarse ni atribuirse a cuestiones de género.
Este episodio mantiene el debate sobre los límites en los espacios de trabajo públicos, las dinámicas de poder y la importancia de un trato respetuoso, especialmente cuando las cámaras están encendidas.