La icónica firma de moda Forever 21 se ha declarado en bancarrota por segunda vez y ha anunciado el cese de sus operaciones en Estados Unidos, marcando un nuevo capítulo en su prolongada lucha financiera.
Por: Staff / La Voz
Estados Unidos.- La icónica firma de moda Forever 21 se ha declarado en bancarrota por segunda vez y ha anunciado el cese de sus operaciones en Estados Unidos, marcando un nuevo capítulo en su prolongada lucha financiera.
F21 OpCo, operadora de las tiendas Forever 21 en el país, ha solicitado acogerse voluntariamente a la Ley de Quiebras en un tribunal de Delaware. En un comunicado, la compañía informó que procederá con "una liquidación ordenada" de sus actividades en EE.UU. Sin embargo, también ha expresado su disposición a ser adquirida por otra empresa y a vender algunos o todos sus activos para continuar operando en alguna capacidad.
De acuerdo con documentos judiciales citados por medios estadounidenses, la firma se ha puesto en contacto en los últimos meses con más de 200 posibles compradores, pero hasta el momento no ha logrado concretar ninguna negociación que garantice su supervivencia.
Stephen Colulombe, codirector de reestructuración de Forever 21, atribuye la crisis de la compañía a la competencia de gigantes del comercio electrónico como Shein y Temu. Según sus declaraciones judiciales, la marca se ha visto "negativamente afectada" por la exención "de minimis", una regulación que permite el envío a EE.UU. de mercancías con un valor inferior a $800 dólares sin pagar aranceles. Esta medida ha sido aprovechada por las plataformas chinas para inundar el mercado estadounidense con productos a precios considerablemente bajos.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha propuesto eliminar esta exención para los envíos provenientes de China, tras el creciente escrutinio de legisladores y sectores comerciales que han denunciado la ventaja competitiva desleal que ha beneficiado a empresas como AliExpress, Temu y Shein.
Forever 21 ya se había declarado en quiebra en 2019, lo que llevó a una reestructuración global con el cierre de varias tiendas en EE.UU. y su salida de los mercados de Asia y Europa. Posteriormente, fue adquirida por Sparc Group, una empresa conjunta entre Authentic Brands Group y Simon Property Group, pero sus problemas financieros persisten. La incertidumbre ahora rodea el futuro de la marca, que durante décadas ha sido un referente de la moda rápida a precios asequibles.