El incidente de agresión a Claudia Sheinbaum durante su caminata en el Centro Histórico destaca la importancia de la seguridad en sus trayectos.
Por: Staff / La Voz
CIUDAD DE MÉXICO, 4 de noviembre — La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, sufrió un incidente de acoso por parte de un hombre no identificado mientras realizaba un recorrido a pie en la calle República de Argentina, en el corazón del Centro Histórico de la Ciudad de México. El sujeto intentó besarla sin consentimiento y abrazarla por la espalda antes de ser contenido por el equipo de seguridad presidencial.
El hecho ocurrió durante una caminata que la mandataria realizaba desde Palacio Nacional, su residencia oficial, hacia las oficinas generales de la Secretaría de Educación Pública (SEP). A pesar de la presencia de su equipo de ayudantía, la espontaneidad del acercamiento puso en evidencia un fallo de contención inmediata.
El forcejeo y la rápida intervención
Las imágenes y testimonios difundidos sobre el incidente muestran el momento exacto en que el hombre se acercó abruptamente a la Presidenta. Inicialmente, el individuo buscó besarla en el cuello y posteriormente intentó rodearla con sus brazos por detrás.
Según el material gráfico, la presidenta Claudia Sheinbaum logró retirar las manos del hombre y reaccionar antes de que la situación escalara. Inmediatamente, el personal de ayudantía y seguridad asignado a la mandataria intervino, logrando apartar al sujeto de la zona y neutralizar el riesgo.
Las fuentes de seguridad confirmaron que el incidente "no pasó a mayores" gracias a la rápida reacción del personal de protección, quienes se aseguraron de que la Presidenta continuara su trayecto sin más contratiempos.
Recorridos públicos y riesgos de seguridad
El acoso a Claudia Sheinbaum durante un recorrido público subraya los retos de seguridad que enfrenta la mandataria, quien a menudo busca mantener un contacto cercano con la ciudadanía. Previo al incidente, Sheinbaum había estado saludando, dialogando y tomándose fotografías con simpatizantes que se congregaron en las calles del Centro Histórico de CDMX, una práctica que busca reforzar su cercanía con el electorado.
El incidente, catalogado como agresión o acoso físico por la naturaleza invasiva del contacto no deseado, plantea interrogantes sobre los protocolos de seguridad de la Presidenta de México, especialmente durante estos trayectos no motorizados que la exponen a interacciones directas con el público.
Hasta el momento, ni la oficina de la Presidencia de la República ni la Fiscalía han emitido un comunicado oficial sobre si se tomaron acciones legales contra el hombre que acosó a Claudia Sheinbaum o si se reforzará el anillo de seguridad que la acompaña en sus traslados. La seguridad en el área de Palacio Nacional y las zonas aledañas suele ser alta, por lo que la facilidad con la que el individuo se acercó a la jefa del Ejecutivo ha generado debate en plataformas sociales.