El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó este viernes su compromiso de poner fin al cambio de horario
Por: Staff / La Voz
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó este viernes su compromiso de poner fin al cambio de horario, una práctica que ha sido objeto de debate durante años debido a las dudas sobre sus beneficios y efectividad.
A través de su red social, Truth Social, Trump declaró: "El Partido Republicano hará todo lo posible para eliminar el horario de verano, que tiene un electorado pequeño pero fuerte, ¡aunque no debería!" Esta declaración retoma una propuesta que el mandatario ya había planteado en 2019.
El horario de verano: ¿beneficio o inconveniente?
El horario de verano, conocido en inglés como Daylight Saving Time (DST), consiste en adelantar los relojes una hora el segundo domingo de marzo para aprovechar más horas de luz natural, y retrasarlos el primer domingo de noviembre para volver al horario estándar.
Sin embargo, para Trump, esta práctica es "inconveniente y muy costosa" para la nación. La eliminación del horario de verano, no obstante, requeriría la aprobación del Congreso, lo que podría enfrentar divisiones políticas y regionales.
Intentos anteriores de abolición
En 2022, el Senado de Estados Unidos sorprendió al aprobar el proyecto de ley del senador Marco Rubio, de Florida, que buscaba hacer permanente el horario de verano en todo el país a partir de 2023. A pesar de este avance, la propuesta quedó estancada en la Cámara de Representantes y no llegó a implementarse.
Actualmente, los estados de Arizona y Hawái son los únicos que no adoptan el horario de verano, lo que refleja la diversidad de opiniones sobre su utilidad.
Un debate en curso
Los críticos del cambio de horario argumentan que el ajuste afecta la salud de las personas, interrumpe las rutinas y tiene un impacto limitado en el ahorro energético, su propósito original. Por otro lado, los defensores señalan que permite aprovechar más horas de luz en la tarde y podría beneficiar a sectores como el comercio y el turismo.
Trump, ahora nuevamente en el centro del debate, promete liderar un cambio que podría poner fin a una tradición de más de un siglo en Estados Unidos. Sin embargo, la eliminación del horario de verano dependerá de la voluntad del Congreso y de si la propuesta logra conciliar las diferentes perspectivas de legisladores y ciudadanos.