La jornada de 40 horas semanales en México no beneficiará a todos los trabajadores, especialmente sectores informales y burócratas.
Por: Staff / La Voz
En 2024, la posibilidad de implementar una jornada laboral de 40 horas semanales en México sigue siendo un tema de interés nacional. Sin embargo, no todos los trabajadores podrán beneficiarse de esta reforma, aún si llega a ser aprobada. En este contexto, muchas personas se preguntan qué grupos quedarían fuera de esta modificación a la Ley Federal del Trabajo (LFT).
A pesar del avance de la propuesta para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas, ciertos trabajadores quedarán excluidos de este beneficio.
Trabajadores con menos de seis días laborales por semana: Si bien la reducción busca mejorar las condiciones laborales, no aplicaría para aquellos que ya trabajan menos de seis días a la semana y tienen una jornada de ocho horas o menos. Estos empleados ya estarían dentro de un horario que no requiere reducción.
Trabajadores del sector informal: Una parte de la población laboral en México está fuera del sistema formal de empleo. Al no estar bajo la normativa de la Ley Federal del Trabajo, la reforma no impactaría en sus condiciones laborales. De acuerdo con el INEGI, se estima que más del 55% de la población laboral en México trabaja en la informalidad.
Burócratas con horarios ya reducidos: En el caso de empleados gubernamentales que ya disfrutan de jornadas laborales más cortas, entre 30 y 36 horas semanales, la reforma tampoco tendría un impacto. Esto se debe a que sus condiciones laborales ya son consideradas como ventajosas.
La reducción de la jornada laboral en México ha sido un tema de discusión desde 2023, pero el avance ha sido lento. En diciembre de ese año, se programó una mesa de trabajo para el 10 de enero de 2024, pero no se llevó a cabo.
Al hablar de la jornada laboral, es inevitable hacer comparaciones con otros países que ya han implementado reducciones en sus horarios de trabajo:
Dinamarca: Los trabajadores disfrutan de una jornada de aproximadamente 26 horas semanales, una de las más cortas del mundo.
Alemania: La jornada laboral promedio es de 26.6 horas a la semana.
Estados Unidos: Aunque el promedio es de 34.4 horas semanales, el enfoque flexible permite adaptaciones según el sector.
Países Bajos: Con una jornada de 29 horas semanales, se prioriza el balance entre la vida laboral y personal.
México tiene una de las jornadas laborales más largas, con 48 horas semanales. La reducción a 40 horas aproximaría al país a los estándares de las naciones desarrolladas, mejorando la calidad de vida de los trabajadores.
La reducción de la jornada laboral tiene el potencial de aumentar la productividad en las empresas, como se ha visto en países donde se han implementado jornadas más cortas. Algunos beneficios que se esperan son:
Mayor productividad: Países como Suecia han mostrado que jornadas más cortas pueden incrementar la eficiencia laboral. En experimentos de seis horas de trabajo diarias, los empleados fueron más productivos y presentaron menos ausencias.
Mejor bienestar: La reducción de horas mejora la satisfacción laboral, lo que se traduce en empleados más comprometidos.
Reducción de estrés: Menos horas laborales ayudan a reducir el agotamiento y el estrés, lo que puede prevenir problemas de salud a largo plazo.
Algunos sectores pueden enfrentar dificultades para adaptarse a la reducción de la jornada laboral. Entre las principales razones están:
Trabajo esencial: Sectores como salud y seguridad requieren una presencia constante, lo que hace difícil reducir sus horarios.
Impacto económico: Las pequeñas y medianas empresas podrían tener dificultades para ajustarse a la reforma sin comprometer su viabilidad económica.
Proceso gradual: Algunos sectores pueden estar excluidos temporalmente, mientras se evalúan los impactos a nivel nacional antes de aplicar la reforma de manera completa.