Ovidio Guzmán López, conocido como "El Ratón", hijo de Joaquín "El Chapo" Guzmán, se declaró culpable este 11 de julio en una corte federal de Chicago
Por: Azeneth García
Ovidio Guzmán López, conocido como "El Ratón", hijo de Joaquín "El Chapo" Guzmán, se declaró culpable este 11 de julio en una corte federal de Chicago por cuatro cargos, incluidos narcotráfico, lavado de dinero, crimen organizado y posesión de armas de fuego.
En la audiencia ante la jueza Sharon Coleman, Guzmán López admitió haber operado una red de tráfico internacional de drogas —cocaína, heroína, metanfetamina, marihuana y fentanilo—, como parte de la facción del Cártel de Sinaloa llamada "Los Chapitos". También aceptó el compromiso de cumplir con un pago de 80 millones de dólares.
Como parte de un acuerdo de culpabilidad, Ozvidio se comprometió a colaborar con las autoridades estadounidenses, aportando evidencia, testimonio y asistencia que podría implicar a otros líderes del cártel, incluyendo a "El Mayo" Zambada. La sentencia se programará en los próximos meses, con la reducción de pena condicionada a la efectividad de su cooperación, que podría evitar la cadena perpetua.
Su declaración representa la primera de los hijos de El Chapo en aceptar responsabilidad penal ante tribunales estadounidenses, un hito que fortalece la estrategia de EE.UU. contra el tráfico de fentanilo, principal causante de muertes por sobredosis en ese país.
Este acuerdo ocurre en medio de una interna sangrienta por el control del cártel, reactivada tras la entrega de "El Mayo" por parte de Joaquín Guzmán, desencadenando más de 1 600 muertes y 1 700 desapariciones en Sinaloa.
La presidenta Claudia Sheinbaum cuestionó la división de EE.UU. entre catalogar cárteles como terroristas mientras negocia con sus integrantes, exigió coordinación bilateral y lamentó la falta de información oficial sobre el proceso.
El acuerdo con Ovidio Guzmán marca un momento crucial en la guerra legal contra el narcotráfico transnacional, inaugurando una posible cascada de confesiones que podrían alcanzar altos niveles del cártel. La decisión ahora recae en si su colaboración logrará desmantelar estructuras criminales o solo acelera la fragmentación del poder en Sinaloa.