Un simple descuido podría ser suficiente para pasar el Día de Reyes tras las rejas o bien, con una multa de miles de pesos.
Por: Staff / La Voz
El Día de Reyes está a la vuelta de la esquina y la compra y venta de Roscas de Reyes se encuentra en pleno apogeo.
Este pan dulce de forma ovalada se ha convertido en toda una tradición, y las personas que suelen prepararlas y venderlas deben de tener cuidado, ya que un simple descuido podría ser suficiente para ser enviados a prisión o multado con hasta 260 mil pesos.
¿Por qué podrían multarte por fabricar o vender Roscas de Reyes?
Es simple. Entre todos los ingredientes que puede llevar una Rosca de Reyes, existe uno llamado acitrón, que preocupa a las autoridades ambientales de México.
El acitrón es un dulce cristalizado que se extrae a través de una limpieza en biznagas, planta espinosa en forma de bola que se encuentra en peligro de extinción.
“Negarnos a incluir el acitrón en los platillos tradicionales mexicanos como el pavo de Navidad, los chiles en nogada, la capirotada, los dulces cristalizados o la rosca de Reyes, aplaca la amenaza que ha puesto al filo de la extinción a un cacto globoso que presta enormes servicios ambientales”, refiere el Gobierno de México en su página web.
Por lo anterior, la Norma Oficial Mexicana 059 pide la protección de las biznagas y también emite el castigo que recibirían aquellas personas que extraigan flora o fauna silvestre, terrestre o acuática en veda, endémicas o en peligro de extinción, quienes “podrían ser sancionados con una pena de uno a nueve años de prisión y una multa que podría llegar a ser de hasta 260 mil 640 pesos”, señala.
¿Cómo sustituir el acitrón de las Roscas de Reyes?
Existen muchas alternativas a tomar para elaborar Roscas de Reyes sin afectar las biznagas y, al mismo tiempo, protegerse de la Norma Oficial Mexicana 059.
Por ejemplo, puedes acompañar el pan con trocitos de higo o papaya cristalizados, que, de hecho, se han convertido en frutas ampliamente utilizadas en la elaboración de las roscas.
El chilacayote y el dulce de membrillo también son buenas opciones para no recurrir al acitrón y ayudar a la protección de la biznaga.