Por: Agencia
En la franja de municipios por donde corre el ducto Tuxpan-Azcapotzalco se ha incrementado la incidencia delictiva y se vive con un alto rezago social.
Cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) revelan que, en los últimos cuatro años, en esas regiones han aumentado 44% los delitos. Durante 2015 se iniciaron mil 635 carpetas de investigación por homicidio doloso con arma de fuego, secuestro extorsivo, extorsión y narcomenudeo. En 2018 se dispararon a dos mil 361 carpetas. El conteo de delitos corresponde a 24 de los 30 municipios de Veracruz, Puebla, Hidalgo, Estado de México y la Ciudad de México, las cinco entidades federativas por las que corre el poliducto Tuxpan-Azcapotzalco. Esta franja será recorrida el martes por el presidente López Obrador, quien pretende dialogar con los pobladores para solicitarles que no permitan el robo de combustible. De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Veracruz, Puebla e Hidalgo están entre los siete estados con mayor rezago social a nivel nacional. En la veintena de municipios, denominados pueblos huachicoleros, que atraviesan el ducto Tuxpan-Azcapotzalco, hay zonas rurales, con menos de cien mil habitantes, extremadamente fragmentados, sin infraestructura y con sitios donde la pobreza alcanza a 80% de su población y la pobreza extrema, a 40 por ciento. En por lo menos una decena de estos, la educación superior no llega ni a 10% de su población, según indicadores del Inegi.Mientras en 2015 se iniciaron 1,635 carpetas de investigación en delitos de alto impacto, el año pasado la cifra alcanzó 2,36.
En la franja de municipios por los que corre el ducto Tuxpan-Azcapotzalco, la incidencia delictiva se ha incrementado 44% en los últimos cuatro años.
Un conteo realizado por Excélsior, con base en cifras del Secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), reveló que durante 2015 se iniciaron mil 635 carpetas de investigación en la llamada ruta del huachicol por los delitos de homicidio doloso con arma de fuego, secuestro extorsivo, extorsión y narcomenudeo.
En 2016 la cifra de incidencia fue de mil 999 indagatorias, para 2017 bajaron a mil 749 y el año pasado se dispararon a dos mil 361 carpetas.
Para este comparativo se tomaron en cuenta los periodos enero-noviembre de cada año referido. El conteo de delitos corresponde a 24 de los 30 municipios de Veracruz, Puebla, Hidalgo, Estado de México y la Ciudad de México, las cinco entidades federativas por las que corre el poliducto Tuxpan-Azcapotzalco.
Relevancia
De acuerdo con información del gobierno federal, los municipios por los cuales atraviesa el ducto Tuxpan-Azcapotzalco es el más importante de su tipo en el país, ya que abastece de combustible al Valle de México, la zona de mayor demanda a nivel nacional. Tiene capacidad para transportar 160 mil barriles de gasolina por día, lo que equivale a 25 millones de litros.
En un desglose por estados, los cuatro municipios correspondientes a Veracruz (Tuxpan, Cazones de Herrera, Tihuatlán y Coatzintla) concentraron 267 casos de asesinatos, plagios, extorsiones y denuncias por narcomenudeo entre 2015 y 2018.
Los seis de Puebla (Venustiano Carranza, Jalpan, Xicotepec, Huauchinango, Ahuazotepec y Zacatlán) sumaron 273 carpetas por los delitos señalados en los últimos cuatro años. Los tres de Hidalgo (Cuautepec de Hinojosa, Tepeapulco y Tlanalapa) registraron 85. Los siete del Edomex (Axapusco, Otumba, San Martín de las Pirámides, Teotihuacán, Acolman, Ecatepec y Tlalnepantla) concentraron tres mil 631 delitos y las tres alcaldías de la CDMX que albergan el ducto (Gustavo A. Madero, Azcapotzalco y Miguel Hidalgo) registraron una incidencia de tres mil 488 hechos delictivos.
Alta incidencia
Aunque la mayor parte de las carpetas corresponden a la zona conurbada de la capital del país, hay datos que perfilan el alza en la incidencia. Destacan casos en el interior de los estados como Tuxpan, que en 2015 registró diez homicidios dolosos y para el año pasado tenía 23. Huachinango tenía seis asesinatos en 2015 y en 2018 contabilizó 26.
Otro ejemplo es Tihuatlán, que en 2015 no registró carpetas por los cuatro delitos contabilizados y para 2017 ya tenía 26.