Por El Eventual.
Por: El Eventual
La semana que hoy inicia será un poco movida, tomando en cuenta que es la última semana de los actuales Secretarios Generales de las Secciones 147 y 288, mientras el Águila y el Látigo, calientan el brazo para arrancar su función de cuatro años, el Látigo, tendrá su prueba de fuego en la revisión del tabuladora.
Por otro lado, los obreros de 60 o más años de edad siguen en su postura de salir bajo el sistema de Retiro Voluntario, entre ambas plantas se calcula un aproximado a los 400 trabajadores que dicen ya cumplieron su ciclo laboral y dicen que quieren disfrutar su pensión, después de más de 40 años de trabajo.
En cierta forma tienen razón cuando recuerdan casos de ex obreros que apenas salieron y a los pocos meses fallecieron, no disfrutaron ni el dinero ni la pensión, además la mayoría de ellos presentan fuertes problemas de salud, hasta para caminar y destacan que corren el riesgo de sufrir un accidente.
Ojala y se les de noticias pronto sobre el tema, no hay día que no arriben a los recintos sindicales, pero la respuesta es la misma, no hay forma de conseguir el retiro, pero de que l dirigencia sindical negocia de eso no hay la menor duda, veremos que sigue en los próximos días en este tema.
Y hoy como todos los días el fiscalista Cesar Villareal Ramos, comparte la reflexión semanal, muy acertada por cierto, cuando dice que si se tiene que soltar algo, suéltalo hace más daño cargarlo sobre las espaladas y por toda la vida, ojalá y la lectura les ayude en este transitar por la vida.
Llegué a casa esa tarde del trabajo y mi esposa me estaba esperando con una cara de “Ya no más”. Efectivamente me dijo: “Mi amor, ya no soporto este olor, es necesario hacer algo. El ratón muerto hiede insoportablemente, hay que localizarlo”. Y puse manos a la obra.
Esa tarde con pocas ganas de hacerlo inicie mi profunda pesquisa y luego de casi una hora siguiendo mi olfato, mi escasa intuición y mi poca experiencia forense, logré dar con el muerto. Estaba en el cielo raso cerca de la cocina. Nos había atormentado el olor los últimos tres días, pero ahora había llegado la hora del alivio y descanso para nuestros golpeados olfatos sensibles.
Ese día entendí que cuando el ratón muere, la vida no debe parar. Hay que buscarlo, desecharlo , no ignorarlo y volver a comenzar. Cuando algo muere hay que enterrarlo. Nada es eterno, salvo la vida que el Señor ofrece. Todo lo demás muere. Se mueren las finanzas, las personas, la épocas, las relaciones, la salud, el trabajo, las posiciones. Cuando algo muere en la vida, no debemos parar. Hay que buscar el ratón y enterrarlo.
He encontrado muchos que prefieren vivir el restos de sus vidas con el olor nauseabundo del lamento, la queja y la victimización y cuando eso pasa la vida deja de fluir. Se quedan en la esquina de la existencia humana sin procesar el quebranto ignorando que cuando algo muere es porque hay otro algo que quiere vivir.
Cuando el ratón muere nunca faltan los que vienen para culparnos de la muerte del ratón, para darnos las consabidas clases de lo que deberíamos haber o no haber hecho. Llegan los maestros de la vida para decirnos que debido a la muerte del ratón no podremos volver a comenzar. Que nuestra meta se acabo. Que no vale la pena volver a comenzar.
Ustedes no paren ni para escucharlos. La vida no para. Aprende de lo sucedido y sigue adelante. Ellos pueden dar sus clases en otro salón, porque ustedes están ocupados en hacer salón para mis promesas., recuerden Dios tiene sus tiempos y sus tiempos nunca se equivocan.
Los tiempos de Dios son precisos. No fallan. Cuando algo muere es porque hay otro algo que comenzará a vivir. El es el principio y el Fin. En El todo comienza y todo acaba. No te aferres a nada, menos a los muertos. Lo que hoy te hace llorar, mañana te hará reír. Cuando el tiempo se cumpla lo verás.El reloj de Dios tiene su tiempo ajustado y siempre da la hora exacta aunque casi nunca coincide con mi reloj.
Hermoso mensaje, verdad?
Dios los Bendiga
Nos leemos mañana..