Saludamos hoy en su día a las maestras, a las arquitectas de su propio destino, ingenieras, doctoras, azafatas, secretarias, las gerentes, directoras, a las monjas y a las brujas.
Por: Jesús Guajardo
Mujer,
Si puedes tú con Dios hablar,
Pregúntale si yo alguna vez
Te he dejado de adorar
Desde mi mundo rodeado de mujeres:
MANIFIESTO
Mi amor a doña Herlinda linda, para Toni y para Sofía.
Para las bebés, las niñas, jovencitas, señoritas, las mamás, mamás solteras, las queridas tías, abuelas y bisabuelas; a las mamasitas y las mamasotas y a las hijas de su madre.
Sepan de nuestro amor y reconocimiento por ser mujeres.
Saludamos hoy en su día a las maestras, a las arquitectas de su propio destino, ingenieras, doctoras, azafatas, secretarias, las gerentes, directoras, a las monjas y a las brujas.
Para las musas inspiradoras del arte.
Gracias a la vida por enviar una Eva a cada Adán, mujer que nos despierta cada día, mujer que nos arrulla cada noche.
Para la mujer que nos cuida y alimenta, con sus pechos primero con su mágica cocina luego.
Para las que han perdido un pecho en la batalla luchando por su vida y siguen siendo más bellas y más fuertes cada día.
A las cocineras, las dueñas del comal donde extienden las de harina, a mi gordita querida y las querendonas, las indigentes, las mujeres de mundo y a las del bajo mundo también, a las presidentes, porque las presidentas no existen.
Las del amor y paz y las guerreras, las de combate.
Brindo mi amor a la mujer perfecta, y para la imperfecta no, porque no las hay, son todas en perfectas en su medida, peso, color y tamaño.
A las mujeres que regalan y nos prodigan amor y para las mujeres que lo venden; y como decía Agustín Lara: Mujer Divina, Mujer de Cabaret, Señora Tentación, Amor de mis Amores: Santa y Aventurera.
Para la mujer de carne y hueso, sepan que preferimos la carne al hueso, y así las amamos.
El ocho de marzo es el día de la Mujer.