Por: Jesús Guajardo
DOMINGO A MEDIO JUNIO:
DÍA DEL PADRE
Padre nuestro que estas en el cielo.
Desde algún domingo de junio, día del Padre.
Ser padre, o ser papá, es uno de los mayores y mejores placeres que nos brinda la vida, momento álgido, mágico de la creación, combinado casi siempre con recreación.
Así heredamos nuestro ADN que, combinado con el de la mamá, produce la cosa más bella del mundo.
Nueve meses después de un embarazo en panza ajena, recibimos los dos, a un bebé que sólo sabe llorar, comer y descomer.
Bebé al que a lo largo de los años vamos volviendo humano al plantar nuestras palabras entre sus neuronas y su lengua, al vestirlo con las costumbres que un día nos fueron impuestas, no hay nada más lindo que cada mañana te llamen papi.
El compromiso de ser papá, de ser un buen papá, es ser un buen ejemplo, aparentar sabiduría, ser un buen motivador, un maestro y un espejo.
Aceptar que a la mamá se le quiera más y se le festeje mucho más en su día.
Funciones del papá que no hace la mamá:
Plantar la semilla.
Persistir hasta que prenda.
Heredarle nuestro apellido.
Tomar fotos en cada graduación.
Bailar con tu nena en sus quince años.
Llevarla al altar.
Que padre es ser padre.