El legendario luchador está por cerrar una etapa de casi 5 décadas en la lucha libre profesional; "Me voy satisfecho con lo que hice", aseguró.
Por: Edson Rojas
Después de 49 años de carrera en el pancracio profesional, Ramón Ibarra Banda ha decidido cerrar un ciclo en su vida deportiva que tuvo incontables momentos de gloria y dolor.
El nativo de San Buenaventura, Coahuila, pero criado y forjado luchísticamente en Monclova, está ante su retiro como gladiador. Hace unos meses emprendió la gira de despedida y en poco tiempo guardará de forma definitiva la máscara y la indumentaria que le dieron reconocimiento en México y el mundo.
"Mi retiro es a causa de dos cosas. La primera es que quiero dejar libre mi lugar a la juventud, y la segunda es la edad. En este momento, físicamente no estoy muy bien. A pesar de que mucha gente me dice que me veo bien, la verdad es que tengo muchas lesiones. Si ahorita puedo seguir valiéndome por mi mismo, creo que es el momento de decir adiós después de 49 años de carrera y 68 años de edad", comentó Remo Banda.
"Me voy satisfecho con lo que hice. Yo era una estrella a nivel local, pero busqué superarme y logré llegar a los planos estelares", señaló el gladiador.
"Como Remo Banda gané tres cabelleras en la EMLL, de muy buenos luchadores como lo fueron Comando Ruso, César Curiel y Gran Cochisse, como Volador fui campeón nacional de parejas con Ángel Azteca y Misterioso. Y como Super Parka, el personaje que más me gustó y disfruté, tuve un poco más de éxito, me dio a conocer más de forma internacional ya que me permitió llegar a Japón, Panamá, Puerto Rico, Estados Unidos y Canadá", añadió.
Discípulo del maestro Alberto Mora, Ramón Ibarra Banda destacó desde sus inicios por su estilo elegante y espectaculares vuelos. Remo Banda se convirtió en un ídolo en las arenas que existían en la Región en la década de los ochentas, después recibió la invitación del legendario René Guajardo para trabajar en otras plazas del Norte del país, aumentando su popularidad.
A finales de los ochentas, Remo Banda se le unió a sus paisanos Herodes, Jerry Estrada, Adolfo Tapia, Makros y Guerrero Negro en la Capital del País. El esteta recibió una oportunidad de trabajar para la Empresa Mexicana de Lucha Libre, donde se fogueó por un par de años antes de enmascararse como el Volador, personaje que lo catapultó a la fama.
La historia de Ibarra Banda continuó en la empresa Triple A, donde continuó cosechando éxitos. Sin embargo, en 1995 perdió la capucha de Volador en un duelo de apuesta frente a su otrora amigo, Misterioso.
Después de este tropiezo, Remo se convirtió en el personaje de Súper Parka para iniciar otra exitosa etapa, en la que sostuvo grandes rivalidades ante figuras como el Hijo del Santo, La Parka, Hijo del Perro Aguayo y otros.
"Soy feliz siendo luchador, pero es tiempo del retiro. La lucha libre me ha dado mucho, principalmente la oportunidad de tener bien a mi familia, conocer países y personas. Mi plan es impartir clases de lucha, compartir y transmitir lo poco que sé y que ha aprendido", señaló el gladiador.
"Me voy agradecido con todo el público que me apoyó, y espero que sigan apoyando mi legado, a mi hijo Volador Jr. quien nació y aprendió aquí en Monclova, y hoy es una figura a nivel mundial, así como al Hijo del Volador y mi nieto Flyer", finalizó.