Por: Agencia
La Selección Mexicana derrotó por 3-1 a su similar de Panamá en la actividad de la Liga de Naciones de Concacaf.
El primer partido de Gerardo Martino en el Estadio Azteca fue de inicio mucho más tenso de lo que había presupuestado el timonel, México vivió un primer tiempo lleno de contrastes. Fue un dominio total de inicio a final, lleno de exceso de confianza y errores individuales, que al final lograron claridad. El ‘Tata’ no mantuvo su filosofía de realizar pocos cambios de un partido a otro, optó por un equipo con cinco elementos distintos a comparación del último juego ante Bermudas, con Raúl Gudiño bajo el marco, Alan Mozo, Erick Aguirre, Rodolfo Pizarro y Roberto Alvarado. Temprano en el juego vino la primer jugada polémica cuando el árbitro Ivan Barton decidió dejar correr una jugada apretada dentro del área en donde parecía falta sobre Roberto Alvarado que bien pudo marcarse como penal.
Hirving ‘Chucky’ Lozano fue un auténtico ‘demonio’ para el cuadro panameño que rápidamente le puso un ‘alto’ con una dura entrada por el costado derecho, aunque el delantero del Napoli no se amedrentó y pronto respondió.