Un hombre ebrio fue encontrado tirado en el suelo, causando preocupación entre los asistentes.
Por: Jaime Guerrero
MONCLOVA, COAH.— Ayer por la tarde, momentos de tensión se vivieron en un centro comercial del bulevar Francisco I. Madero... o al menos así lo creyeron quienes no reconocieron de inmediato al protagonista de siempre: el célebre ebrio del sector, un visitante tan recurrente como las ofertas de fin de semana.
Los guardias de seguridad solicitaron apoyo de emergencia tras encontrar a un hombre tirado en el suelo y "bañado en sangre", justo en la entrada principal. Como marca el protocolo, llamaron a los paramédicos; pero los socorristas no aparecieron.
Y no lo hicieron porque, según personal del área, ya sabían perfectamente quién era. Un viejo conocido de los servicios de emergencia, famoso por sus constantes encuentros con el suelo y su tóxica amistad con el alcohol. "Es el mismo de siempre", comentaron, con la tranquilidad de quien ya vio esa escena unas cien veces.
Mientras tanto, los guardias —sin la clarividencia de los socorristas— cercaron la zona y esperaron ayuda que nunca llegó. Los clientes hicieron lo que mejor saben hacer: mirar, grabar, murmurar... y luego seguir comprando como si nada.
El hombre fue finalmente atendido por el personal de seguridad del propio establecimiento. La alarmante mancha de "sangre" resultó ser una mezcla poco digna entre una herida menor y una intoxicación etílica que lo dejó más dramático que lesionado.
Al final, el ebrio se retiró por su propio pie (más o menos), los guardias regresaron a sus rondines y los socorristas continuaron su jornada sin imaginar que su "ausencia estratégica" terminaría siendo noticia.
En la tienda todo volvió a la normalidad: es decir, al caos ordenado de siempre.
El incidente en el centro comercial de Monclova dejó a los clientes preocupados, pero no hubo consecuencias graves. La situación fue manejada por el personal de seguridad, quien atendió al hombre ebrio.
Los guardias de seguridad actuaron rápidamente, pero la falta de respuesta de los paramédicos generó críticas sobre la atención de emergencias en la zona.