Por: Agencia
China criticó hoy que Estados Unidos y Canadá todavía no hayan dado ninguna explicación sobre la detención de la directora financiera e hija del fundador de Huawei, Meng Wanzhou, por las autoridades canadienses para ser extraditada a Estados Unidos (EU) por una supuesta violación de sanciones impuestas por Washington contra Irán.
China ha presentado una queja formal a la parte canadiense y a la estadounidense pidiéndoles que expliquen inmediatamente la razón de la detención y liberen a la persona detenida", afirmó el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Geng Shuang, en una rueda de prensa en Pekín.
Por lo que sé, Canadá y EU no han dado ninguna explicación sobre la razón de la detención", añadió Geng, quien aseguró que esta detención "viola los derechos humanos de la persona detenida".
Meng, hija del fundador de Huawei, Ren Zhengfei fue arrestada en Vancouver el 1 de diciembre a petición de EU por la supuesta violación de las sanciones impuestas por Washington contra Irán, según el Ministerio de Justicia de Canadá, aunque los detalles del caso se mantienen en secreto por orden judicial.
¿VIOLÓ HUAWEI LAS SANCIONES IMPUESTAS A IRÁN?
Por su parte, Huawei aseguró hoy en un comunicado que la compañía cumple "con todas las leyes y regulaciones aplicables donde opera, incluidas las leyes y regulaciones aplicables de control y sanción de las exportaciones de las Naciones Unidas, Estados Unidos y la Unión Europea". Sin embargo, el diario independiente South China Morning Post publicó hoy que en una charla interna con los empleados de Huawei en octubre, en la que Meng estuvo acompañada de su padre y fundador de la compañía, Ren Zhengfei, ésta habría señalado que existen escenarios en los que la empresa "puede sopesar los costes y aceptar los riegos de no cumplir con las leyes". Según esta información, tanto Meng como su progenitor hicieron hincapié en la necesidad de "controlar los costes del cumplimiento", así como "no exceder lo que se requiere legalmente en jurisdicciones individuales".La detención podría aumentar la tensión entre Washington y Pekín, que en los últimos meses han mantenido una intensa guerra comercial con la imposición de varias oleadas de aranceles bidireccionales y con acusaciones contra empresas, especialmente contra las chinas que operan en territorio estadounidense.