Siempre habrá una buena excusa para que los amigos se reúnan y pasen de una grata noche acompañado de sus mejores pasos de baile, sus mejores recetas par que la cena sea majestuosa, de sus mejores tonos para que el karaoke jamás falle y claro; de sus mejores chistes para que las carcajadas no falten.
A temprana hora de la tarde del sábado los amigos se reunieron llegando a las siete, en la maravillosa granja “Las villas”, lugar que dio pie a que la noche se prestara para ser larga a unos amigos que cómicamente se conocieron tiempo atrás, disfrutando de una rica cena y de la mágica compañía.