Desde hace 34 años, la Dulcería "El Brasil" se ha convertido en un referente inigualable de sabor y tradición en la región centro. Conocida por sus exquisitos dulces de leche, este negocio familiar ha logrado cautivar los paladares de varias generaciones, posicionándose como un ícono de la repostería artesanal.
Fue en 1990 que por idea de la señora Martha Delia Contreras Solís se creó el negocio en el Ejido Huizachal, ubicado en el kilómetro 50 de la carretera Monclova-Candela, a dos cuadras hacia adentro. Ellos preparaban el dulce de leche que luego llevaban en vasijitas a Monclova.
Ahora, su esposo Abraham Reyna Márquez y sus hijos Hernán Reyna Contreras y Luz Adriana Reyna Contreras, continúan su legado.
En un pequeño cuartito en el que la única ventilación es la parte superior de las paredes y donde las temperaturas llegan a alcanzar los 50 grados centígrados, es que se mezclan entre 40 a 50 litros de leche de cabra y de vaca, un proceso que tarde hasta cuatro horas y media.
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"A la hora que sea y a la temperatura que sea, aquí nomás aguanta el que lo hace de corazón, cada dulce es una pequeña obra de arte", expresó el señor Abraham Reyna, quien no tiene permitido estar dentro del cuarto por la las altas temperaturas y la cantidad de humo que puede inhalar, sin embargo, eso no le impide que continúe siendo parte fundamental de la dulcería.
Dependiendo de la cantidad de pedidos son los cazos que hacen, hay días en las que la familia hace hasta tres cazos por semana, que son distribuidos a Monclova, Frontera, Candela, Saltillo e incluso partes de Estados Unidos.
Luz Adriana es quien ayuda con la preparación de los conoce de leche, así como de las glorias y los tamarindos, mientras que su hermano Hernán se encarga de la promoción y el comercio, demostrando su amor al legado familiar y a las tradiciones.
