FRONTERA., COAH.- Amenazando con aplicar un proceso judicial en su contra por una deuda que nunca contrajo, un bufete de abogados del municipio de Frontera se encuentra enviando cartas de intimidación y enviando mensajes de acoso en contra de una habitante de al colonia Borja, quien asegura en ningún momento contrajo una deuda con la tienda Elektra, la cual le están requiriendo aún cuando no cuentan con firmas ni cuentas a nombre de ella.
Juana Esmeralda Hernández dijo sentirse atemorizada debido a que un abogado perteneciente a la firma Alvarado y Asociados continuamente acude a su domicilio a dejar cartas en donde la deuda que supuestamente adquirió con la tienda está judicializada, amenazándola con embargar sus bienes si no paga la cantidad de 20 mil pesos de un supuesto crédito que ella nunca adquirió.
Dijo que todo inició cuando el bufete le requirió el pago de una lavadora que ella había adquirido con la tienda Elektra hace más de 14 años, la cual fue regresada a la tienda por defecto de fábrica, aparato que el despacho pretendía cobrarle, sin embargo al recibir las pruebas de la que la señora Juanita había regresado el artículo a la tienda, estos buscaron otra manera de molestar y días después comenzaron a solicitarle el pago de un préstamo que según habían solicitado a su nombre, del cual nunca firmó ningún documento que autorizara la entrega del mismo.
Mencionó que las primeras cartas de acoso las recibió en el mes de junio, pero estas no procedieron por lo que hace unos días regresaron a su hogar con ordenes de “embargo” que según se deben ejecutar en su contra, pero sin mostrarle ningún documento oficial firmado por ella que respalde la supuesta deuda que tiene con la institución de crédito.
“La deuda no es mía, ni está a mi nombre, está a nombre de mi hijo Lucio Martín Izaguirre Hernández, pero en ningún momento él solicitó tampoco un crédito y si esto hubiera sucedido no se lo hubieran otorgado por la cuenta no es de él, ellos solo quieren asustarme para que pague 20 mil pesos y por eso me acosan de forma telefónica y en mi propio hogar, lo cual es ilegal”.
La afectada aseguró que ya una vez acudió a la tienda a denunciar el caso de intimidación del que son objeto ella y su familia, pero no les dieron ninguna solución, mientras que el despacho sigue enviado a su gente a señalar artículos que están en su casa.